El reaccionario dúo ya se frota las manos. Bonilla, dispuesto a ocupar seis años más, una de las poltronas de la cueva de venenosos alacranes que es la Cámara de Senadores; y su fiel lacayo, Marco Antonio Blásquez Salinas, listo para empuñar el látigo de la presidencia municipal de la ciudad de Tijuana.
La candidata del PAN a la alcaldía del Pueblo Mágico aspira al voto de los estudiantes para ganar; propone construir una central camionera y habilitar Ventanilla Única municipal
El reaccionario dúo ya se frota las manos. Bonilla, dispuesto a ocupar seis años más, una de las poltronas de la cueva de venenosos alacranes que es la Cámara de Senadores; y su fiel lacayo, Marco Antonio Blásquez Salinas, listo para empuñar el látigo de la presidencia municipal de la ciudad de Tijuana.
El candidato a la alcaldía de Tijuana por el PT, Marco Antonio Blásquez Salinas, reto a las autoridades a que le remolquen el “Papuchobus”, vehículo en el que se transporta en homenaje a los taxistas rojo y negro.
Marco Antonio Corona Bolaños fue de esos diputados del PRI que, aliados con panistas como el entonces diputado Carlos Torres, aprobaron la Ley Bonilla para darle, de forma que resultaría inconstitucional, cinco años de gobierno en lugar de los dos para los cuales fue electo el entonces morenista Jaime Bonilla Valdez.
A casi tres años de gestión de Marina del Pilar, el centro penitenciario para mujeres no se ha materializado; el proyecto técnico apenas tiene 50 por ciento de avance. Actualmente hay 658 féminas en penales del estado
