Parece que la palabra “autonomía” no se la da bien a la clase política bajacaliforniana emanada de la Cuarta Transformación, y en lo que se evidencia como otro retroceso, el Congreso del Estado -de mayoría morenista- aprobó reformas y abrogación de dos leyes orgánicas, para terminar con la independencia de las nacientes fiscalías especializadas en Combate a la Corrupción y en Atención de Delitos Electorales.