Iniciamos el mes de marzo, el que algunas personas llaman el mes de las mujeres, por lo que me resulta pertinente regalarnos información y algunas reflexiones que acerquen a las mujeres, a las adolescentes y a las niñas a la tan ansiada paz y a la vida libre de violencia; porque son nuestros derechos y sin ellos difícilmente podemos gozar de otros derechos, resultando prácticamente imposible la vida digna.