Una elección de Estado que no respetó las leyes ni la cordura democrática, ni la ética, ni la voluntad popular. Se habla de pruebas contundentes de un mega fraude que hizo ganar al gobierno en el poder con una “amplia ventaja”
El obispo de Matagalpa es acusado sin pruebas de organizar a grupos adversos al gobierno nicaragüense desde donde sospechan de un Golpe de Estado contra el régimen.