Miles de personas se ven obligadas a abandonar sus hogares y sus comunidades en México ante la amenazante presencia del narcotráfico y otras expresiones del crimen organizado. Pese a la no aceptación del fenómeno por parte de sus autoridades locales, Jalisco se incorpora de manera reciente a un nefasto grupo de estados donde se registra la migración interna por causas de violencia o inseguridad en el país, sobre todo ante la presencia de los cárteles de Sinaloa (CS) y Jalisco Nueva Generación (CJNG).