Durante su precampaña, la ex jefa de Gobierno de Ciudad de México no tuvo -por la coordinación- un buen sabor político en Baja California, pues aun cuando en un inicio la gobernadora Marina Ávila estaba con ella, semanas después dio salto político y apoyó al ex secretario de Gobernación, Adán Augusto López, en la interna contra Sheinbaum.