En el podcast hablamos de la extradición forzada de Ovidio Guzmán; de los policías y mariinos involucrados en desapariciones forzadas en Sonora; de freno al viaducto elevado y del legado de Rodrigo Valle.
La salida del Mencho y El Mayo de la lista de los más buscados de la DEA, no significa que les hayan dejado de perseguir, pero sí que en estos momentos y en el gobierno de Joe Biden, quien irá por la reelección en 2024, la prioridad es combatir el tráfico de fentanilo, droga que ha permeado entre la sociedad consumidora del vecino país, con cifras de cientos de miles de muertos anualmente.
Si bien han sido los inmigrantes chinos los primeros en sentar los pilares del comercio de la droga en México, a partir de los años treinta las bandas criminales mexicanas comenzaron a tener un rol fundamental en dicha nueva actividad económica, aprovechándose de la ley seca impuesta por Estados Unidos y de sus relaciones con las autoridades locales.
En el podcast hablamos sobre la desaparición de jóvenes en Mexicali, de la nula investigación en México contra los hijos de El Chapo; del ex asistente del Fiscal Carpio detenido en la garita; y de la militarización y la Guardia Nacional.
No le dejan ver la luz del sol a ese individuo detenido en N.Y., pero ese tipo cegó la luz de muchos ojos al asesinar vastas personas en México y en el extranjero.
La extradición, pues, va para largo. Especialmente cuando se conoce la no muy eficiente labor de la SRE y de la Fiscalía General de la República (FGR), a lo cual se sumarán las estrategias jurídicas que inicien los abogados de Guzmán Loera para retenerlo en el país
Los imperialismos se confrontan visiblemente con el Reino de Dios, cuando en la oscuridad brilla la personalidad de personas como la Madre Teresa o Karol Wojtyla; si al interior y exterior de la Iglesia actual, hombres de Dios como el Papa Francisco, son como sal de la tierra, luz del mundo.
La suspensión de actividad marítima debido a disturbios en Sinaloa después de la detención de Ovidio Guzmán López, dejó afectaciones por más de 3 millones de dólares al estado sudcaliforniano
La lección que dejó 2019 para el Cártel de Sinaloa es la violencia como mecanismo de presión. Si se muestra el poderío criminal, se causa terror entre la población y será más vigente la política federal de “abrazos, no balazos” para lograr el cometido de actuar con impunidad