Matthew McConaughey y America Ferrera estelarizan esta película bien dirigida por Peter Greengrass, con una historia verídica de un rescate en donde un conductor de autobús y una maestra salvan la vida de niños en medio de un voraz incendio forestal.
Los hechos ocurrieron en California en 2018, y la manera precisa en que Greengrass logró recrear la atmósfera del siniestro nos mantiene en vilo, mientras vemos a Kevin McKay luchar contra el reloj para recoger a 22 alumnos que están en la zona de evacuación y bajo el cuidado de Mary Ludwig. El problema es que el fuego ya está dentro del área, así que el riesgo es inimaginable, al igual que la valentía de ambos personajes perfectamente interpretados.
Fuera de un contexto algo innecesario sobre el caos familiar y laboral de Kevin al inicio del filme, todo fluye bien, conmueve, entretiene y se vuelve tan creínle porque, pues, lo es. *** y media.
Punto final.- Adiós maestro Robert Redford.