El demorado pago de la deuda que mantiene Jersey con los productores de leche en Baja California es preocupante para la gobernadora Marina del Pilar Avila Olmeda. Aunque reconoce que se trata de un problema entre particulares, el gobierno estatal le ha puesto interés por tratarse del único producto lácteo con un siglo de antigüedad y originario de la localidad que sigue en el gusto del público.
“Es preocupante y por supuesto ocupante. Entonces estamos ocupándonos, le he dado atención y se le ha dado seguimiento por parte de la Secretaría de Gobierno para atender esa situación y que se pueda resolver a la brevedad”, dijo la gobernadora a ZETA.
El secretario de gobierno Alfredo Álvarez Cárdenas es el representante del gobierno estatal y reconoce que los pagos de la deuda han sido lentos.
“Es un tema que nos preocupa a todas las partes. Al gobierno desde la perspectiva de la cadena de suministro, también en la lechería, también desde la lógica de la marca que es una marca emblemática en la región. Y yo creo que las partes en ese ejercicio de preocupación han estado poniendo empeño para resolver el tema. Me parece que vamos, como le decía, no a la velocidad que quisieran y que tal vez necesitan los lecheros y los alfareros que están detrás de ellos, pero vamos avanzando paulatinamente”, explicó Álvarez.
Los lecheros confiaron a ZETA que los pagos han sido limitados y lo que más les preocupa es que la deuda afecta en su liquidez para comprar alimento para el ganado, que son los más afectados al contar con el alimento que los productores de alfalfa quieren vender, con calidad y precio adversas.
“Ellos acordaron algunas contraprestaciones en el tiempo que se están cumpliendo; si mal no recuerdo, tenemos reunión la próxima semana para registrar los avances”, explicó el secretario Álvarez.
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Al gobierno de Marina del Pilar no le consta que los pagos se hayan efectuado, pero piensan que la solución está cerca, ya que ninguno de los lecheros se ha acercado para acusar a la Jersey; tampoco otro productor de la cadena de la agricultura, con quienes también sostienen problemas económicos agravados por la falta de contrato.
“Yo creo que es un asunto que va avanzando positivamente; a lo mejor no es la velocidad que se quisiera, pues las condiciones de pago de la empresa son limitadas, pero están haciendo el esfuerzo de liquidar algunos activos para poder pagar”, dijo Álvarez. “Se van modificando algunos acuerdos, se van ajustando, pero hasta el día de hoy yo no tengo ningún reporte de que estén incumpliendo y si lo estuvieran, regresan a la mesa”, insistió.