La doble moral de los políticos no conoce de colores. Cuando en la oposición los políticos se acogen a su “ideología” y critican al partido en el poder a costa de lo que sea, especialmente en sus debilidades, abusos o excesos. Ahora está de moda Morena, el partido prácticamente hegemónico en el país. Y en época de vacaciones, la crítica se enfoca hacia los viajes a todo lujo que hacen los morenistas, de manera incongruente, pues dista esta conducta de sus principios de austeridad y vivir en la “justa medianía”. Pero luego los opositores no critican lo que pasa en casa, que de repente es lo mismo, aunque digan que no es igual. Al tiempo que hacen llamados nacionales por los lujos en los viajes de prominentes morenistas, como Monreal, Delgado, Yunes, López Beltrán, las panistas de Baja California hacen lo propio. En el Comité Estatal del PAN detectaron que tanto la dirigente en Baja California, Lizbeth Mata Lozano, como la titular de Promoción de la Mujer, América Soto Villa, se fueron a gusto de vacaciones a espacios como los que critican. La primera, Mata, presumió sus fotos en Roma, incluso partícipe de una audiencia privada con el Papa León XIV; mientras la segunda, siguiendo el ejemplo de Andy López, se mostró en imágenes tomadas en Japón. Ahora sí que ya están como el partido oficial: si los excesos los cometo yo, no cuentan; pero si los hace el adversario, sí. ¡Uf!
Criticando y viajando

Autor(a)
- Publicidad -