Aunque el encargado de despacho del Sistema de Parques Temáticos de Tijuana (Simpatt), Israel Villafuerte Zamora también fue señalado en una denuncia presentada ante Sindicatura Procuradora, por supuestamente pretender ceder a la ex esposa e hijo del señor Gabino Ávila Moctezuma, el contrato de los juegos mecánicos que éste último ha operado hace más de 30 años en el Parque Morelos, el titular de la paramunicipal continúa en el cargo.
En la denuncia presentada ante la Sindicatura Procuradora, signada con el número de expediente SN-824, al que ZETA tuvo acceso, los “concesionarios” del Simpatt señalaron a Villafuerte Zamora y José Alberto Castellanos Parra, quien laboraba en la presidencia del XXV Ayuntamiento de Tijuana, por “presuntos actos de corrupción”.
“El director del Simpatt, cuyo desempeño debe ser investigado por las autoridades correspondientes ha actuado en complicidad con la señora Esperanza Ortiz Banda y el señor Noé Ramón Ávila Ortiz, para obtener concesiones que han sido operadas por más de 30 años por el señor Gabino Ávila Moctezuma, y que hoy quieren ser transferidas de manera irregular, bajo un esquema de tráfico de influencias y abuso de poder”, se lee en el escrito.
Mientras que en la denuncia SN-820, la abogada de Gabino Ávila, mencionó: “Tuve conocimiento que el director del Simpatt pretende destituir a mi cliente de su concesión y otorgársela sin fundamento alguno a la ex esposa de nombre Esperanza Ortiz Banda y a su hijo, Noé Ramón Ávila Ortiz, quienes sin sustento legal alguno se presentaron a las instalaciones del parque con el fin de que el titular de dicho parque les permitiera el acceso a los juegos y poder tomar posesión de las pertenencias de mi cliente. Es por lo que solicito se solicite informe de autoridad al titular del Simpatt… En caso de que se percate de una irregularidad, esta autoridad inicie expediente administrativo en contra del servidor público”.
Tras la presentación de ambas denuncias, el 4 de julio, el día 14 se le solicitó su renuncia a Castellanos Parra, pero no así al encargado de la paramunicipal.
La misma síndico procuradora, Teresita de Jesús Balderas Beltrán, reconoció que existen tres denuncias contra de Villafuerte Zamora, dos de concesionarios del Parque Morelos y una por abogados, las cuales fueron presentadas hace alrededor de dos meses, sin embargo, aún no se ha determinado su plena responsabilidad, pues las investigaciones continúan, aunque mencionó se cuentan con “evidencias muy claras”.
En cuanto a José Alberto Castellanos, indicó que tampoco se ha determinado su responsabilidad y aclaró que la solicitud de renuncia de cualquier funcionario es por parte del ejecutivo del Ayuntamiento o por el titular de su área, no así por la Sindicatura.
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ZETA buscó al encargado del Simpatt para conocer su postura tras los señalamientos en su contra, pero éste prefirió reservarse indicando que el asunto aún permanece en investigación.
El conflicto que detonó las denuncias
El conflicto que detonó las denuncias contra el encargado de despacho del Simpatt y Castellanos Parra, inició por una disputa familiar por la propiedad de los juegos mecánicos que operan en el parque Morelos, entre los señores Gabino Ávila Moctezuma y Esperanza Ortiz, tras su divorcio. Desde entonces ambas partes se autodenominan como los propietarios de los juegos, que en la feria del Parque Morelos se conocen como Atracciones Ávila Ortiz, por lo que el asunto se encuentra actualmente en litigio y en espera de que un juez resuelva a quién le corresponde cada uno.
Versión Esperanza Ortiz y Noé Ávila
Según la versión de la señora Esperanza Ortiz Banda y de su hijo Noé Ávila Ortiz, de los 25 juegos que forman parte del contrato de operación en el Parque Morelos, el cual reconocieron está a nombre del señor Gabino Ávila, sólo dos le corresponden a éste, mientras que el resto son de ella.
La señora Ortiz presentó a ZETA varias facturas de diversos juegos mecánicos. Algunas de los documentos aparecen a nombre de los señores Héctor Becerra Romero y Silviano Becerra Ugalde, pero cedidas a la mujer por Christian Becerra Romero. Otras a nombre de José Santiago Carreola, pero éste le cedió los derechos a Esperanza. Otras atracciones están endosadas a nombre de Pedro Torres Montoya. Noé Ortiz refirió que hay otras facturas a nombre de su madre, pero se encuentran en posesión de su padre y éste nunca se las dio.
Esperanza Ortiz incluso presentó a su nombre la factura de renovación del seguro GNP de 23 juegos, entre los que estos últimos 12 que dice haber pagado, por un total de 32 mil 058.72 pesos, con vigencia del 23 de marzo de 2025 al 23 de marzo de 2026.
Otros señalamientos de madre e hijo, es que tras los conflictos con el señor Ávila lo han denunciado por violencia familiar (0204-2025-7239), robo (0204-2025-9837) y amenazas (02024-2025-19939).
Respecto a los señalamientos de las denuncias en que se les menciona, aceptaron conocer a Castellanos Parra, pero negaron que hubiera algún tipo de interferencia para favorecerlos en la obtención del contrato de operación de los juegos. En el caso del encargado del SIMPATT, comentaron que éste más bien ha favorecido al señor Ávila Moctezuma con el contrato de operación en el parque Morelos, pues “ellos tienen muchos negocios”.
Versión Gabino Ávila
Por su parte, el señor Gabino Ávila manifestó que mientras estuvo casado por bienes separados con la señora Esperanza Ortiz, adquirió 25 juegos mecánicos, que son los que tiene bajo contrato de operación en el Parque Morelos y a la fecha operan regularmente bajo contrato vigente. Según él, cuenta con las facturas para comprobar que son de su propiedad, aunque a ZETA no se las presentó.
Ávila Moctezuma también mencionó que, probablemente, la señora Ortiz cuente con facturas a su nombre de siete u ocho juegos, por lo que no está en desacuerdo de que los retire del parque, aunque dijo que estos se pagaron con su dinero, en cuanto al resto aseguró que son de él.
Suspensión de juegos mecánicos
Según un documento expedido el 13 de junio, firmado por el encargado del Simpatt, los juegos mecánicos del señor Ávila Moctezuma se encontraban suspendidos por Protección Civil Municipal, por lo que no podían operar y quedaron bajo resguardo de Villafuerte Zamora. Pero Protección Civil aclaró que, si bien realizó observaciones en medidas de seguridad el 13 de mayo, no ordenó la suspensión.
Para esclarecer la situación, el director general de la Secretaría de Gobierno Municipal, José Alonso López Sepúlveda, explicó que la suspensión de los juegos -notificada el 24 de mayo- que tiene Gabino Ávila, en los polígonos JM011 y JM012, no tuvo que ver con las observaciones de Protección Civil, sino con el atraso de la renta del contrato del señor; por lo que una vez saldó su adeudo, el 30 de junio se levantó la suspensión e incluso renovó su contrato el 1 de julio, con vigencia de seis meses.
En una visita realizada por ZETA el martes 22 de julio, se constató que los juegos operan con regularidad, y los propios comerciantes y propietarios de los mismos indicaron que nunca se detuvo su actividad.