La comunidad de Todos Santos se ha levantado una vez más en defensa de su territorio, ante un proyecto turístico denominado Palmoral que, acusan, atenta contra el oasis de la comunidad y que, además, incumple con el Programa de Desarrollo Urbano (PDU).
Las calles del también llamado Pueblo Mágico se llenaron de carteles y de voces unidas para exigir la intervención de autoridades municipales, estatales y federales, así como para pedir a la sociedad sudcaliforniana que se sume a esta lucha.
Exigen un alto inmediato a la construcción, que califican como ilegal, del proyecto Palmoral, que se lleva a cabo en la zona del palmar de Todos Santos, que es conocida como el corazón del oasis del poblado.
Alertan que esta obra no cuenta con los permisos correspondientes y que contraviene abiertamente el PDU, ya que este instrumento de regulación no permite construcciones en esta área debido al valor ecológico, hidrológico, histórico y cultural.
“A pesar de ello, la obra avanza día con día, destruyendo flora nativa, hábitats esenciales y suelos fértiles, generando impactos irreversibles en un ecosistema vital para el equilibrio ambiental y la vida comunitaria”, expresaron a través de un documento cientos de habitantes que protestaron en Todos Santos.
Por medio de la organización ciudadana colectiva procedieron a presentar dos demandas populares: una el 15 de abril ante el Ayuntamiento de La Paz, y otra el 25 de abril en la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
En estos recursos señalan y describen la ilegalidad y los riesgos de Palmoral, pero hasta el momento las autoridades municipales y federales no han intervenido efectivamente.
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La actuación ha sido deficiente y permisiva, enfatizan los pobladores, ya que la obra continúa sin retrasos ni objeciones, en total impunidad.
“Hasta el momento, ni la alcaldesa, ni el diputado local, ni los organismos responsables del ordenamiento territorial y ambiental han emitido posicionamiento alguno, lo que profundiza la sospecha de contubernio y omisión deliberada frente a la devastación del oasis”, recalcaron.
La comunidad se ha preparado con documentación precisa, en la que explican que el palmar de Todos Santos se encuentra en una zona denominada como Aprovechamiento Paisajístico (AP) dentro del PDU, que está reservada para actividades turísticas o recreativas de muy bajo impacto, permitiendo el contacto con el medio natural sin que ello implique grandes redes de infraestructura que pongan en riesgo el equilibrio ecológico.
Los pobladores evidenciaron que Pamoral, que es parte del proyecto Santa Terra, no presentó Manifestación de Impacto Ambiental (MIA), por lo que, señalan, sus promoventes no realizaron el proceso correspondiente ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
“No hizo el proceso debido donde se hace pública su manifestación de impacto ambiental, para que la gente pueda conocer los detalles y emitir comentarios en caso de que estén generando un proyecto fuera de lineamiento, lo cual es justo lo que está sucediendo”, reiteraron.
Es por ello que la sociedad todosanteña hizo una lista con demandas, destacando la suspensión inmediata y clausura definitiva de Palmoral, así como la remediación total del daño ambiental causado al palmar.
Además, exigen una investigación y sanción a los responsables que permitieron, encubrieron y facilitaron la obra y que los servidores públicos dejen de guardar silencio y asuman su responsabilidad ante el pueblo.
Mega desarrollos no pasarán encima de nuestro patrimonio: Castro
Tras las manifestaciones públicas, el gobernador del Estado, Víctor Castro Cosío, reconoció que se enteró de este proyecto a través de las redes sociales y expuso que desconocía los pormenores de la obra en Todos Santos.
No obstante, a pesar del desconocimiento sobre el tema, el mandatario recalcó que su administración no dará autorizaciones a ningún consorcio o complejo que no se apegue a la legalidad.
Argumentó que la mayoría de proyectos entran directamente ante la Semarnat, ya que no necesitan el aval del gobierno del estado.
“Si no es legalmente ya les dije que el gobierno del estado no va a dar autorización alguna si nos correspondiera; ahora, no sé en qué nivel está. Sinceramente no conozco el proyecto. Y me dicen: ‘¿Usted no lo conoce?’, no porque normalmente estos proyectos los ingresan en la Semarnat o bien en los Ayuntamientos para el uso del suelo. Pero con nosotros, yo no tengo registrado ningún ingreso”, declaró.
Castro Cosío reiteró que no permitirá que los “mega desarrollos” pasen por encima del patrimonio histórico y cultural de Baja California Sur.
Por otra parte, la alcaldesa de La Paz, Milena Quiroga Romero, aseguró que se trata de un tema que compete a las autoridades federales.
“Entiendo que si no tienen los permisos eso tendrá que revisarse con las dependencias federales correspondientes. Entiendo que tiene que ver con un tema federal, no sé si ellos tienen las autorizaciones por parte de Semarnat. Nosotros cumplimos, pedimos y corroboramos que se cumpla con el PDU”, comentó.
ZETA solicitó una entrevista al Ayuntamiento de La Paz con autoridades del Instituto Municipal de Planeación (Implan), para que aclare los señalamientos que hace la comunidad de Todos Santos con respecto a las violaciones del PDU, sin embargo, no hubo respuesta antes del cierre de esta edición.