El 19 de agosto del 2024 el Ayuntamiento de La Paz, a través de la presidenta municipal, Milena Quiroga Romero pusieron en marcha la operación de 20 camiones denominados “Tiburones Urbanos” que formarían parte del Sistema Municipal de Transporte a través de un fideicomiso denominado “Fideicomiso Maestro del Sistema Municipal de Transporte (SMT)”.
Para operar las unidades “nuevas” el Ayuntamiento aportó inicialmente 10 millones de pesos para subsidiar a la empresa Transporte Urbano de La Paz, S.A. de C.V., y así sostener al particular.
Según documentos en poder de ZETA, las arcas municipales están costeando a la empresa privada desde agosto, soportando la nula utilidad del transporte, ya que regularmente funciona con la mínima ocupación de usuarios.
“A veces van vacíos, a veces con una o dos personas, y esto es en todos los horarios. Es una pena que el Ayuntamiento esté subsidiando a la empresa de los Tiburones Urbanos y a los peseros, a los transportistas particulares los estén dejando morir, no es justo eso. ¿Cómo va a ser que el ‘Municipio’ le pague a una empresa por operar rutas innecesarias?”, denunció Joel Gutiérrez, estudiante de la UABCS y usuario de transporte público.
El Ayuntamiento que administra Milena Quiroga está “pagando la renta” de las unidades de transporte denominadas “TU Tiburón Urbano”, de Transporte Urbano de La Paz, y así lo ha hecho desde el 5 de septiembre del 2024, cuando pagó un millón 173 mil 338.54 pesos por los kilómetros recorridos de las unidades en las rutas definidas.
La tarifa de pasaje en las “nuevas” unidades fue de 16 pesos, pero con esta modalidad no importa si se traslada a 1 o 100 pasajeros, pues el pago sería de 34.25 pesos por kilómetro recorrido.
“En este modelo se buscaron inversionistas, ellos compran las unidades y se asocian con los concesionarios. Entonces, los concesionarios terminan prestando su concesión. Los concesionarios pueden ganar mensualmente porque van a estar utilizando su concesión; ellos van a tener una ganancia que va a variar dependiendo de las rutas; aquí se les va a pagar 8000 pesos mínimo y dependiendo la cantidad de kilometraje que hace al día”, indicó Milena Quiroga.
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Cuando pusieron en marcha a los Tiburones Urbanos, fueron recibidos con rechazo por parte de los concesionarios del transporte, quienes dijeron que se pretendía privatizar el transporte, y lo que es peor, financiarlo a través del Ayuntamiento de La Paz.

La presidenta municipal sostuvo que sería una cadena productiva, en donde los concesionarios que se unieran, los choferes y el inversionista se beneficiarían, todas las ganancias irían al Fideicomiso y el sobrante sería repartido en partes iguales.
Sin embargo, los Tiburones Urbanos han sido un fracaso; no han dejado ganancias y, por el contrario, agotaron el “Fideicomiso Maestro”.
“Si un concesionario quiere ser chofer, o sea, quiere ser el conductor de la unidad o de las unidades, va a tener una quincena; o sea, va a tener un salario en donde van a tener sus prestaciones y todo que esté legal, de manera que van a tener la renta y aparte van a tener pues el salario por ser chofer. Las ganancias que se den en el transporte público, de ahí se va a pagar al concesionario, de ahí se va a pagar al conductor, y conforme vaya aumentando la cantidad del pasaje al año, se va a hacer un corte y se van a repartir las utilidades”, reiteró Quiroga.
Lo cierto es que se tuvo que recortar el número de rutas y la tarifa por pasajero a finales de febrero de este año debido a que el Ayuntamiento de La Paz ha sostenido por meses a Transporte Urbano de La Paz; los Tiburones Urbanos se convirtieron en un “barril sin fondo”, con rutas que nacieron sin oportunidad de trascender, por ya contar con unidades circulando por las mismas zonas; además, con manejo opaco del recurso económico.
“No es costeable por algo tan simple, y que desafortunadamente nunca han querido entender en la administración municipal que es, que ese transporte público nuevo lo metieron en las rutas donde ya existe un transporte. Y todavía hoy seguimos teniendo muchísimas colonias sin transporte público, porque esos transportes que metieron debieron haber entrado a esas rutas que hoy no se están cubriendo”, denunció Estuardo González, ex regidor del Ayuntamiento de La Paz.
TRANSPORTE URBANO BENEFICIADO CON FIDEICOMISO
Entre el 5 de septiembre del 2024 y el 14 de febrero del 2025, el Ayuntamiento de La Paz realizó 32 pagos por el concepto de “servicio de transporte urbano público en la Paz BCS por semana”, lo equivale a una “renta” semanal por un monto total de 27 millones 535 mil 307.08 pesos.
Durante el 2024 se realizaron ocho pagos en el mes de septiembre por un monto de ocho millones 701 mil 935.02 pesos; siete en octubre por un valor total de cinco millones 432 mil 008.74 pesos; en noviembre se saldaron cinco facturas por un monto de 5 millones 449 mil 136.48 pesos; y cinco en diciembre por tres millones 136 mil 048.85 pesos.
En 2025 se han realizado tres pagos en el mes de enero por un total de cuatro millones 816 mil 177.99 pesos; y para febrero se pagaron un total de cuatro facturas por un valor de tres millones 453 mil 169.10 pesos.
Aunque del 19 de agosto del 2024 al 14 de febrero hay 25 semanas completas, refleja que en algunas se hicieron pagos de más, llegando a 32 facturas pagadas y una cancelada.
En una de las 32 facturas en poder de ZETA, el documento fiscal con folio 285 del 11 de diciembre del 2024 fue emitido por Transporte Urbano de La Paz, S.A. de C.V., a las 11:59 de la mañana por el concepto de “Servicio de Transporte Urbano Público en La Paz BCS semana #16 del 2 al 8 de diciembre de 2024”, por un monto de 920 mil 485.88 pesos, pago en parcialidades o diferido.

Según lo acordado en la firma de contrato, el costo por kilómetro fue de 34.25 pesos y el número total de kilometraje recorrido durante esa semana fue de 26 mil 875.50 kilómetros, resultando el pago por el monto mencionado con cargo al Municipio de La Paz, BCS con Registro Federal de Contribuyentes: MPB9805139D0.
“Es un robo lo que está haciendo el Ayuntamiento de La Paz. ¿Cómo va a financiar a una empresa y deja de lado al hombre-camión, nosotros lo señalamos al principio y hasta denuncia pusimos?”, lanzó Pedro Enrique López, líder transportista de la Alianza de Sitios de Automóviles y Transportes de Alquiler (ASATA).
Es el caso de Transporte Urbano de La Paz, que fue financiado a través de los impuestos de los paceños por instrucciones de la alcaldesa Milena Quiroga Romero, que determinó adherir 20 unidades tipo camión en tres rutas que denominó “Tiburón Urbano”, duplicando en cada caso las rutas ya existentes de transporte tradicional.
Del importe inicial de 10 millones de pesos para activar un “Fideicomiso Maestro”, del cual se ha beneficiado el dueño de las unidades y de las concesiones, ya que algunos transportistas inconformes revisaron cada una de las placas con las que circulan los “Tiburones Urbanos” para confirmar si eran de concesionarios del transporte o de Transporte Urbano de La Paz, S.A. de C.V., resultando positivo éste último.
En una revisión de las concesiones (placas de circulación) con las que operan las unidades del Sistema Municipal de Transporte, se comprobó que algunas son de Baja Pack, Suburcabos, Transporte Urbano de La Paz, ABC y otras relacionadas entre sí.
LAS LETRAS CHIQUITAS
Nadie sabe de dónde salieron los 27.5 millones de pesos que el Ayuntamiento de La Paz pagó a la empresa privada dueña de los Tiburones Urbanos, la cual recibe un pago semanal sólo por recorrer las calles de la ciudad, con y sin pasajeros.
ZETA solicitó una entrevista con servidores públicos del Ayuntamiento, para conocer de dónde salieron los pagos y el por qué la reducción de rutas de los Urbanos: la primera fue Luz Estela Morales Limón, Oficial Mayor quien se negó a dar entrevista; enseguida Rut de la Fuente Velázquez, directora de Seguridad y Tránsito Municipal y también se negó; y por último Abimael Ibarra Agúndez, Secretario General, quien dijo que “ahorita no”.
“Nadie sabe dónde está ese fideicomiso, cómo está funcionando y quién lo maneja; no hay ninguna información. El Ayuntamiento es el que está llevando la carga (económica), bueno, gran parte de la carga del costo del transporte de esa pequeña parte del transporte público, porque solamente son 20 camiones, cuando, insisto, con ese recurso que se ha pagado desde que inició a la fecha, yo te aseguro que ya hubiéramos renovado gran parte de la flotilla con el esquema que presentaban los propios transportistas”, señaló Estuardo González.
De acuerdo con González, ex regidor municipal en la anterior administración, en la que también era presidenta municipal, Milena Quiroga, el Ayuntamiento se encarga de toda la carga presupuestal de los camiones, mantenimiento, oficinas, personal y el pago de los viajes.
“Lo que la ciudadanía no sabe, es que hoy el Ayuntamiento no sólo está pagando las malas decisiones, también está pagando más de dos millones de pesos (mensuales) a la empresa por los kilómetros recorridos de ese transporte, también está pagando el mantenimiento y también está pagando el patio de maniobras, porque así quedó establecido en el reglamento que ellos aprobaron en la administración pasada”, expuso Estuardo.
El Ayuntamiento paceño se hace cargo de los diferentes puntos de venta, los cuales están instalados en oficinas municipales, desde SAPA, Panteones Municipales, Mercados, Tránsito, Servicios Públicos y oficinas de trámites de Gobierno.
También opera una página web, una aplicación de seguimiento y toda la publicidad en diversos medios de comunicación, todo con cargo al erario público de La Paz, así de sencillo las autoridades municipales desvían recursos públicos para atender las necesidades de un privado.
“Qué fácil se la puso el Ayuntamiento a la empresa privada. No sólo le paga sus costes de operación, sino que también puso a disposición puntos de venta de las tarjetas, oficinas en mercados, otros puntos, personal municipal atiende las oficinas y hasta policías que atienden directamente a los Tiburones Urbanos. El Ayuntamiento está desviando recursos públicos para sostener los intereses de un particular, ya basta de abusos”, explicó Pedro Enrique López.
Además, según el ex regidor el Ayuntamiento violó la Ley de Transporte de Baja California Sur, al invadir rutas de servicio ya establecidas.
En el capítulo IX, que habla sobre la extinción de las concesiones de servicio público de transporte, señala el Artículo 40: son causas para la revocación de las concesiones de servicio público de transporte, por la invasión de rutas o zonas no autorizadas para la prestación del servicio.
“Esas tres rutas, debían haber ido a donde no está pasando el camión, en donde los transportistas tradicionales no están prestando el servicio, y no como lo hicieron, que además están violando la Ley de Transporte del Estado, porque el Ayuntamiento, sin autorización, metió ese transporte, el Tiburón Urbano, en rutas que ya están siendo trabajadas, y el reglamento establece que no puede haber invasión de rutas”, finalizó Estuardo González.