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lunes, enero 13, 2025
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Gasolinazo por IEPS e importación en dólares

La Presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, declaró que el precio de las gasolinas y el diésel en México no aumentará más allá de la inflación, sin embargo, los propios datos de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) la desmienten.

Entre el 8 de enero de 2024 y el 6 de enero de 2025, el precio promedio del litro de gasolina regular a nivel nacional pasó de 22.47 a 23.85 pesos, esto es, 1.38 pesos más (6.14 por ciento). En el mismo periodo, el diésel aumentó 1.69 pesos (7.02%), de 24.06 a 25.75.

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En ambos casos, los porcentajes superan la inflación estimada para el cierre de 2024 (4.50%), así, sólo el encarecimiento de la gasolina Premium estuvo acorde a la inflación, al subir 1.01 pesos por litro (4.13%), de 24.40 a 25.41, según información publicada en el reporte Quién es Quién en los Combustibles de la Profeco.

Carlos Rubio Arriola, presidente del Grupo Energético de Baja California Onexpo Baja, explicó a ZETA que cinco factores inciden en el precio del combustible: los costos de la molécula, del flete y de la operación de las estaciones de servicio, así como el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) y el Impuesto al Valor Agregado (IVA).

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El precio de la molécula ha incrementado por la depreciación del peso frente al dólar, que se ubica por encima de los 20 pesos. “En 2024, Petróleos Mexicanos (Pemex) importó más del 50 por ciento del producto de Estados Unidos”, ya que la refinería Dos Bocas aún no está terminada.

El producto se trae en pipas de Deer Park (refinería adquirida por el gobierno mexicano en Texas, Estados Unidos), lo que afecta el costo de los fletes, dependiendo de cada región del territorio nacional en la que se encuentren las estaciones de servicio, pues la mayoría de las gasolineras adquieren la molécula a Pemex, para luego colocarles el aditivo de la marca que vendan.

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En el caso de BC, el combustible llega por barco a la planta de Playas de Rosarito, procedente de Salina Cruz, Oaxaca o de California, Estados Unidos, de modo que el tema del flete “no afecta” tanto, apuntó el empresario.

El otro factor que ha incidido en el alza del precio de las gasolinas, es el encarecimiento en el costo administrativo de las estaciones de servicio, las cuales deben sufragar más impuestos federales, estatales y cuotas patronales por el aumento al salario mínimo, así como otras disposiciones laborales. “Es una situación que tampoco está en manos del gasolinero, pero afecta el precio”, ya que 40% del precio al público está determinado por el costo del capital humano.

El costo administrativo de las estaciones de servicio ha subido porque muchas pagan renta en dólares por el lugar donde están ubicadas, cuotas a las marcas internacionales, así como costos de permisos a la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y calibración de equipos por parte de Profeco . En 2025, sufragarán más por los servicios prestados por diversos proveedores como despachos contables, legales y de mantenimiento de dispensarios, tarifas de agua y luz.

“El sector que represento siempre ha sido muy responsable de estar de la mano del consumidor (pero las estaciones), no son una institución de beneficencia: pagamos impuestos, mantenemos empleados, pagamos Seguro Social, hay inversionistas y dueños que viven de ahí”, dijo Rubio Arriola, consciente de que el precio de los combustibles es un tema “sensible”.

La diferencia en el precio de los combustibles vista en distintas regiones del país también está relacionada con el IVA, ya que en las zonas fronterizas norte y sur, la tasa del gravamen es 8%, menor que en el resto del país (16%),“casi 2 pesos de diferencia del puro IVA del producto”, observó. En tanto, la actualización anual del IEPS fue con base en la inflación.

Según el decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación, las cuotas del IEPS aplicables a partir del 1 de enero de 2025 tomaron en cuenta un incremento de 4.55%, estableciendo 6.45 pesos por litro para la gasolina regular (28 centavos más), de 5.45 pesos para la gasolina Premium (+24 centavos) y de 7.09 pesos por litro de diésel (+30 centavos).

En un decreto posterior sobre las cuotas vigentes del 1 al 10 de enero, se estableció un estímulo fiscal de .23 centavos para la gasolina regular, dejando sin incentivo a la Premium y prácticamente al diésel (0.02).

Iván Escalante, director de Profeco, durante la presentación de los precios de la canasta básica y de las gasolinas, durante la mañanera del pueblo, Foto: Moisés Pablo Nava/Cuartoscuro.com

RECAUDACIÓN HISTÓRICA DE IEPS, MANIPULACIÓN DE DATOS

El lunes 6 de enero, Iván Escalante, titular de Profeco, minimizó el incremento en el precio de los combustibles, señalando que “algunas gasolineras” tienen el indicador de “ganancia más alto”, aunque días antes había amagado con que se colocarían lonas con la leyenda: “X No cargues aquí, se vuelan la barda con los precios” en estaciones con los precios más altos.

Exhibió a una gasolinera Chevron en Culiacán, Sinaloa por tener el precio más alto de la gasolina regular en 26.80 pesos y del diésel en 27.40 pesos, así como otro establecimiento de la misma marca en León, Guanajuato, por tener la gasolina Premium más cara, en 27.99 pesos el litro.

A propósito, Rubio Arriola comentó que en Culiacán se está viviendo una situación “complicada” por el tema de la inseguridad, ya que algunas estaciones cierran por las noches y eso estaría orillando a que se aumente el precio para que los establecimientos puedan sacar sus gastos de operación sin afectar a su personal.

En la conferencia matutina de la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, el titular de la Profeco mostró una gráfica para asegurar que en el sexenio de Felipe Calderón las gasolinas aumentaron en “términos reales” 22.9%; en el de Enrique Peña Nieto, 42.8%; mientras que en el de Andrés Manuel López Obrador se redujo -5.2% y, en lo que va del sexenio de Sheinbaum, -0.4%

“Lo que se hace es suponer o hacer una gráfica en términos reales, como si fueran los pesos de 2025. O sea, el poder de compra se descuenta la inflación, entonces, lo que equivaldría si midiéramos a pesos de 2025 a cómo hubiera estado la gasolina en 2018, son 26 pesos”, justificó la mandataria.

En entrevista con ZETA, Gonzalo Monroy, consultor de energía y director de la firma GMEC, criticó la postura del gobierno, el cual no quiere hacerse responsable de que “los impuestos son los que están encareciendo los combustibles” y ha tratado de culpar a los gasolineros del alza, en lugar de admitir que está recaudando muchísimo por el IEPS.

“2024 cerró con una recaudación del IEPS por diésel y gasolinas por arriba de los 400 mil millones de pesos, la cifra más alta de toda la recaudación mexicana por ese concepto”, destacó, para después acusar que Profeco dejó fuera los “datos atípicos” en las gráficas presentadas para evitar mostrar precios promedio más altos.

“Cuando dicen que se pagaban 26 pesos en 2012 y 2018, no. En ese momento nadie compró ni vendió gasolina a 26 pesos el litro”, señaló Monroy, afirmando además que tampoco puede justificarse la carestía en las gasolinas en nuestro país por los precios del crudo a nivel internacional, ya que éstos se han mantenido relativamente estables. Incluso “hay preocupación porque la demanda de China no sea tan alta y eso mande los precios para abajo”, sentenciaría.

En cuanto a la posibilidad de ser autosuficientes en combustibles conforme a la intención expresada por la autodenominada Cuarta Transformación, “de aquí a 50 años no vamos a ser autosuficientes”.

Al cierre de noviembre de 2024, el sistema de refinación del país producía 256 mil barriles diarios de combustibles, cifra muy por debajo de la demanda del mercado mexicano (más de 800 mil), “todo lo demás continúa siendo importación, como la refinería Deer Park está y seguirá estando en Texas, sigue siendo una gasolina de importación; Dos Bocas sigue en una fase de pruebas y, a partir de 2027, si todo sale bien, va a empezar a producir gasolinas, y lo más que va a producir serán otros 100 mil barriles, muy lejos de esta autosuficiencia en combustibles”, refirió el entrevistado.

Sin embargo, dijo, más preocupante es la tendencia a la baja en la producción de crudo, que ya está en 1.38 millones de barriles diarios, “nivel que se había observado en 1976”.

GASOLINA REGULAR LLEGA A 24.59 PESOS EN TIJUANA

En un recorrido de ZETA por diferentes estaciones de servicio, se observó que el litro de gasolina regular alcanzó los 24.59 pesos y la Premium los 26.99 en una estación Chevron, mientras que el diésel llegó a 25.19 pesos por litro en una estación BP.

Adriana, una empleada del gobierno, afirmó que cada vez “va subiendo más y más” el precio de la gasolina a niveles no vistos y con ello “todo sube”. Para llevar a sus hijas a la escuela e ir a trabajar, a la semana adquiere 25 litros de gasolina regular -aproximadamente 600 pesos-, cuando antes destinaba menos para ese rubro. “Cada año todo sube, independientemente del gobierno del que se trate”, lamentó.

De igual forma, el señor Francisco Arellano Vázquez externó su preocupación de que tanto la gasolina como las tarifas de agua en Baja California, siguen subiendo. En su caso, actualmente destina 100 pesos más por el combustible.

“Ante tantos aumentos estoy pensando regresar a trabajar para compensar mis gastos, porque sí salgo adelante, pero para el nivel de vida que llevaba, está disminuyendo”, compartió el químico pensionado.

Carlos Rubio Arriola, del Grupo Energético de Baja California, señaló que el consumo de gasolina en la región se ha mantenido porque ya no es redituable cargar gasolina en Estados Unidos por las

largas filas, el tiempo del cruce fronterizo y el tipo de cambio, aunado a que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público no brinda algún estímulo a la zona de Tijuana y Rosarito porque los precios de California son los más altos del sur de Estados Unidos, y similares a los de BC.

Las ventas han bajado porque la gente no tiene dinero, “veo a los taxistas que cargan nada más para dos o tres vueltas”, por lo que la venta promedio en Tijuana es de 20 a 25 litros, alrededor de 600 pesos, apuntó el especialista.

Según la página Fuel Prices, al cierre de edición, jueves 9 de enero, el galón de gasolina en San Diego, California costaba 4.519 dólares, que a un tipo de cambio de 20.22 pesos por dólar (visto en casas de cambio de Tijuana), el precio por litro fue de 24.13 pesos; 46 centavos menos que el máximo observado en estaciones de Tijuana.

Para concluir, Rubio Arriola advirtió que de seguirse depreciando el peso con la llegada de Donald Trump a la Presidencia de Estados Unidos, el costo de los combustibles en México seguirá en aumento.

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Autor(a)

Julieta Aragón
Julieta Aragón
Licenciada en Comunicación Social por la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) Xochimilco. Cursé la maestría de Periodismo Político en la Escuela de Periodismo Carlos Septién García y sigo en proceso de tesis. Soy reportera de ZETA desde 2017.
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