Irving Eduardo Torres Yllán, especial para ZETA – Dentro de la temporada de premios, uno de los nombres que comienza a llamar la atención es el de la actriz italo-estadounidense, quien da vida a la Hermana Agnes en la controversial cinta “Cónclave”, de Edward Berger, basada en la novela homónima del británico Robert Harris, donde el espectador es testigo de la forma en que se elige al máximo representante de la Iglesia Católica cuando fallece el anterior.
El personaje de Rossellini sobresale a pesar de los pocos minutos en pantalla, y en una sola escena, logra un personaje memorable y crucial para la historia.
“Imagino que mi personaje era como un sombrero, los sombreros siempre están presentes, cada vez que la cámara me enfocaba, intentaba escuchar cada palabra que el Cardenal decía, cada pequeño detalle, estaba muy alerta a ello. Y eso es lo que creo que da a la Hermana Agnes una presencia”, explicó sobre la aparente invisibilidad de Agnes en “Cónclave”, estrenada en México el pasado fin de semana.
“Como digo en el filme, mi papel es ser invisible, pero no significa que no tenga ojos y oídos, cuando denuncio al Cardenal que está mintiendo, me abro y luego retomo mi rol invisible, habiendo dicho lo que tenía que decir. Lo que me encantó de mi rol es que pude construir un personaje que tiene una gran autoridad, pero tenía que hacerse con silencios. Pensé que era un desafío maravilloso para mí como actriz, y me encantó hacerlo”, remarcó.
Sobre la importancia de la mujer dentro de la Iglesia Católica, “tengo que decir que en mi experiencia con la Iglesia Católica, porque crecí en Italia y fui a una escuela católica, las monjas tienen una gran autoridad, sí, no pueden votar por el Papa, por los cardenales, pero eso no las hace silenciosas; todo el mundo está escuchándolas y quieren su aprobación”, expuso la también modelo.“Francamente, estoy muy feliz de haber nacido en este siglo y no en el pasado, al menos puedo votar, puedo tener propiedad privada, una cuenta bancaria y puedo decidir qué carrera quiero, así que ha habido progresos”.
Al hablar sobre su acercamiento a “Cónclave”, Isabella dijo haber leído el libro, lo cual fue muy útil, y a raíz de una conversación con Edward Berger y el autor Robert Harris, “decidimos que Agnes, aunque la sociedad patriarcal del Vaticano da a las mujeres un papel de invisibilidad, eso no les evita tener autoridad y una voz, aunque en el filme no hablo mucho, aun en silencio pueden tener gran autoridad, así que discutimos ese aspecto y luego hicimos la escena”, concluyó la recientemente nominada al Globo de Oro en la categoría Mejor Actriz de Reparto.