La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo afirmó, el 5 de diciembre de 2024, que su Gobierno pediría a la eventual Administración de Donald Trump -candidato del Partido Republicano y ex mandatario estadounidense, desde el 20 de enero de 2017 hasta el 20 de enero de 2021-, presidente electo de EE. UU., que, en caso de deportaciones, enviara a los migrantes directamente a sus países de origen.
Durante su conferencia de prensa matutina -llevada a cabo desde el Salón Tesorería del Palacio Nacional-, la titular del Poder Ejecutivo Federal explicó que, en la actualidad, existía un acuerdo con Joseph Robinette Biden Jr. -más conocido como Joe Biden, presidente de Estados Unidos, desde el 20 de enero de 2021-, mediante el cual EE. UU. se hacía cargo de enviar a los deportados de regreso a sus países de origen, sin devolverlos a México.
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“Hay un acuerdo actual con la Administración del presidente Biden, en donde, para muchas de las nacionalidades, ellos directamente los envían vía aérea a sus países de origen. Ahí en donde no tienen una relación directa, hay un acuerdo también para que contribuyan desde México a enviar a las personas a sus países de origen”, explicó la mandataria mexicana.
“Evidentemente, nosotros somos solidarios con todos y con todas, pero nuestra principal función es recibir a las y los mexicanos. Y esperamos tener un acuerdo con la Administración Trump, en caso de que haya estas deportaciones, para que ellos también envíen a sus países de origen, a las personas que vienen de otros países”, comentó Sheinbaum Pardo.
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La titular del Poder Ejecutivo Federal dijo que la titular de la Secretaría de Gobernación (SEGOB), Rosa Icela Rodríguez Velázquez, convocaría a los gobernadores del norte de México, a una reunión para abordar el plan a seguir en caso de una deportación masiva, una vez que Trump asumiera la Presidencia de Estados Unidos, el 20 de enero de 2024.
“Apenas ayer acordamos, tuvimos gabinete, nosotros y ahí la secretaria de Gobernación va a convocar a la gobernadora de Baja California [Marina del Pilar Ávila Olmeda], de Sonora [Alfonso Durazo Montaño], de Chihuahua [María Eugenia Campos Galván], de Coahuila [Manolo Jiménez Salinas], Nuevo León [Samuel Alejandro García Sepúlveda], y, Tamaulipas [Américo Villarreal Anaya], para poder tener esta reunión, en donde nos pongamos de acuerdo, cómo recibir a nuestros paisanos y paisanas, en caso de que haya una deportación masiva”, anunció la presidenta mexicana.
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“Ya lo informaremos, lo estamos trabajando en ello, hay una parte que tiene que ver con los consulados, otra parte que tiene que ver con el trabajo que tenemos que hacer en México, esperamos que no ocurra, pero si llega a ocurrir, pues estar preparados para recibirles”, la mandataria nacional.
Un día antes, el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Juan Ramón de la Fuente Ramírez, inició reuniones con cónsules y abogados en Estados Unidos, para afinar la estrategia legal que llevarían a cabo ante una posible deportación masiva ordenada por Trump.
En la sede del Consulado General de México en Dallas, Texas, el canciller encabezó una junta con los 11 cónsules del país radicados en dicho estado y con la representante diplomática mexicana en Oklahoma, Edurne Pineda Ayerbe.
El 5 de diciembre de 2024, De la Fuente Ramírez visitó el Centro de Procesamiento de la Oficina del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) en Dallas, Texas, según lo informó la Secretaría de Relaciones Exteriores.
Acompañado del cónsul general de México en Dallas, Francisco de la Torre Galindo, el funcionario federal conversó con autoridades y personas mexicanas en proceso de deportación, para conocer, de primera mano, las condiciones en las que se daba el mismo y buscar garantizar que sus derechos humanos fueran respetados en todo momento.
