La pugna que sostienen miembros del Cártel Jalisco Nueva Generación y del Cártel de Sinaloa en Tecate, ha escalado a niveles de terror, terminando con la tranquilidad del Pueblo Mágico en ataques en lugares públicos y durante el día, así como agresiones a instalaciones de la Fiscalía General del Estado (FGE) y sus unidades.
Los últimos tres meses han sido de terror para la población tecatense, que incluso ha sido testigo de ataques armados a menores, desapariciones, cobro de piso, incendios de casas y de instalaciones oficiales, así como enfrentamientos armados, heridos y muertos por las colonias del municipio.
De acuerdo a los investigadores, los estragos que se han causado mutuamente entre las células delictivas con enfrentamientos y traiciones internas, han menguado la economía criminal de los cárteles, por lo que para hacerse de recursos y continuar con su guerra, arreciaron en la comisión de delitos como el cobro de piso y el secuestro de personas para exigir rescates, como sucedió en Tijuana a finales de la primera década del siglo.
Las células criminales, están delinquiendo con la imposición de cobros a empresarios y comerciantes, a quienes secuestran a familiares para exigir pagos, amenazan con realizar masacres en eventos públicos o incendian negocios, vehículos y balean fachadas si no acceden a pagar piso.
No sólo ciudadanos organizados y económicamente activos han sido objeto de tal violencia; desde hace aproximadamente dos meses, integrantes del CJNG han trasladado a Baja California, particularmente a Tecate, prácticas de terror como la quema de vehículos, comercios, viviendas e instalaciones propiedad del Gobierno del Estado, como la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tecate y ahora la FGE.
DOS VINCULADOS A PROCESO POR TERRORISMO
De acuerdo a la Fiscalía Regional, los actos de terror por parte de miembros del CJNG se registraron por primera vez en el único Pueblo Mágico de la franja fronteriza, como parte de las nuevas estrategias criminales para intimidar y amenazar a agentes de la FGE, a quienes acusan de proporcionar información y operar a favor de Sinaloa.
Minutos después de la media noche del lunes 9 de diciembre, dos bombas molotov fueron lanzadas hacia el estacionamiento de las instalaciones de la FGE ubicadas en la calle Misión Santa Rosalía de la colonia El Descanso. El fuego causó daños a dos vehículos, una Jeep Liberty y una camioneta pick-up propiedad de la Guardia Nacional.
De acuerdo a la investigación, el plan de los criminales era incendiar los vehículos y colocar una narco manta, lo cual lograron, pero fueron aprehendidos en su escape, luego que una de las rutas utilizada para evadir a la justicia, estaba equipada con cámaras de video vigilancia del C5, lo que permitió a los investigadores el monitoreo y seguimiento en tiempo real de los delincuentes.
Unidades fueron desplegadas de manera inmediata para dar alcance a los responsables a unas cuantas calles del lugar de los hechos, mientras que otro grupo de criminales emprendió la huida a bordo de un automóvil, detonando en varias ocasiones armas cortas al aire para disuadir a las demás unidades que se encaminaban al lugar de los hechos.
Los capturados esa noche fueron Steven Leonardo y Junior Gabriel, de 18 y 21 años, respectivamente; el primero, residente de la colonia Alfonso Garzón (Nido de las Águilas) y el segundo de la colonia Lázaro Cárdenas, ambas de Tecate.
En la narcomanta, que quedó bajo resguardo de la FGE, se advierte a los agentes: “ay esta pendejos sijan pasandole información a los chinolas y les voy a dar en la madre akada uno no la jueguen al valiente rifa CJNG el paquillo 041”.
Los detenidos fueron vinculados a proceso el 11 de diciembre, bajo cargos que incluyen terrorismo; quedaron en prisión preventiva.
No es la primera vez que integrantes del CJNG son identificados por investigadores realizando este tipo de actos que incluyen el uso de artefactos explosivos en Tecate. Durante los primeros minutos del jueves 26 de septiembre, un masculino de complexión delgada prendió fuego a dos unidades propiedad de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tecate, estacionadas en la parte trasera del inmueble sobre Calle Santa Rosalía, a menos de cien metros de las instalaciones de la Fiscalía Regional. Durante su huida, los criminales detonaron armas de fuego.
De nuevo la madrugada de un jueves, pero el 28 de noviembre, tres unidades de la CESPTE, dos tipo pick-up de la marca Nissan color blanco y un Ford Ranger propiedad de la Secretaría de Infraestructura, Desarrollo Urbano y Reordenación Territorial (SIDURT) que se encontraban en el estacionamiento compartido con Recaudación de Rentas del Estado, fueron rociados con combustible para después intentar incendiarlos, aunque no fue posible, debido a la huida de los criminales cuando fueron descubiertos por guardias de seguridad.
Al menos cinco vehículos propiedad de empresarios y comercios han sido incendiados por el CJNG en Tecate como represalia ante la negativa a pagar un porcentaje de lo que producen; los extorsionadores e incendiarios, ofrecen “protección” a cambio del pago o atenerse las consecuencias. De no aceptar el ilícito trueque, la negociación criminal, “la hacen”, dijo uno de los investigadores, a nombre del apodado El Paquillo.
El 3 de octubre, las instalaciones y vehículos de Funeraria San Ramón en Avenida Benito Juárez fueron atacada por sujetos desconocidos que rociaron combustible y prendieron fuego. Semanas antes, en el negocio habían comenzado a recibir llamadas de extorsión por parte del CJNG, mismas que fueron ignoradas, a lo que la célula mafiosa respondió con acciones criminales, quemando vehículos utilizados como carrozas y la fachada de la funeraria.
Otra funeraria, denominada Latinoamericana, que se ubica en Bulevar Defensores, también recibió llamadas de extorsión en las que les solicitaban “cobro por pago de piso”. En ese momento, las dos funerarias cerraron sus puertas ante el miedo de los trabajadores de sufrir un ataque directo a las instalaciones y sus personas. Dos semanas después y con vigilancia del gobierno municipal y Policía estatal, ambos comercios reabrieron sus puertas.
El cobro de piso se ha extendido a comerciantes locales, restaurantes, eventos artísticos, empresarios y gasolinerías, a quienes solicitan pagos exorbitantes que alcanzan el 400 por ciento de lo producido, o bien, una tarifa mensual de miles de pesos.
Por temor a represalias tras haber sufrido quema de propiedades, vehículos, ver baleada la fachada de su negocio o ser identificados por policías deshonestos, las víctimas no suelen presentar denuncia formal.
“Desde ya unos meses he venido recibiendo amenazas vía telefónica por supuestos integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación, se autonombran trabajadores de una persona mencionada como El Paquillo, amenazan con quemar mi negocio, quieren dinero que realmente no tengo, con la pandemia la mayoría de los comerciantes de Tecate estamos luchando por sostener nuestro local, más que por lo que reditúa”, declaró a ZETA uno de los comerciantes.
Otro más se quejó: “En Tecate jamás habíamos tenido este tipo de prácticas, la inacción de las autoridades ha permeado en que estos grupos delictivos crucen la línea de una pugna entre sus propios contrincantes hasta la ciudadanía, nosotros no hacemos nada malo, podemos no sólo cerrar comercios, sino empresas, y todo ello repercute en el tema económico que impacta tanto a los empresarios como a las familias, se debe hacer algo urgente. Nos están quemando carros, nos están quemando nuestro sustento, nos amedrentan, nos amenazan, vivimos con miedo. ¿Qué le falta al gobierno para ayudarnos?, ¿qué debe de pasar en Tecate para que este tipo de personas sean capturadas?”.
SECUESTROS Y BALACERAS
Tres secuestros se han registrado de septiembre a la fecha en Tecate, dos fueron del conocimiento de las autoridades. Los blancos son familiares cercanos a ejidatarios y empresarios, dos de ellos en la zona rural de La Rumorosa, gente conocida, arraigada, que hoy es victima de los grupos delictivos que requieren aumentar sus arcas para comprar droga, armas y pagar a sicarios.
A las 21:23 horas del 11 de diciembre, sujetos armados intentaron privar de la libertad a tres masculinos de 27, 32 y 36 años al exterior de un domicilio en Calle Doctor Arturo Guerra y Séptima de la colonia Juárez, irrumpiendo en el lugar y apuntándoles con armas para después maniatarlos con esposas tácticas. Los subieron a la parte trasera de la camioneta y le prendieron fuego a la vivienda. Cuando se disponían a marcharse, tuvieron de frente una unidad de la Policía Municipal que realizaba un recorrido, y al verse descubiertos, comenzaron a dispararle.
Los municipales respondieron y, en un intento de huida, la camioneta con los criminales y secuestrados echó reversa, volcando sobre la calle. Los atacantes huyeron para dejar tres armas de grueso calibre y tres cortas sobre el pavimento y a las víctimas dentro del vehículo, siendo auxiliados por los agentes. Se trata de los propietarios de un negocio dedicado a la venta de frutas y verduras en esa colonia, denominado Frutería Juárez, a quien buscaban secuestrar.
Apenas unas horas antes, cerca de las 15:00 horas, dos mujeres fueron atacadas mientras se encontraban a bordo de su camioneta Ford Escape color azul al exterior de una dulcería denominada Dulcelandia en Calle Amaya de la colonia Militar, ahí fueron abordadas por sujetos que abrieron fuego contra ambas, lesionando a una en el cuello y a otra en el hombro. En un intento de huida, la persecución a tiros se extendió hasta la colonia Ampliación Descanso, donde fue abandonado otro automóvil con impactos de arma de fuego, a unos metros de una caseta de vigilancia de la Policía Municipal.
Las féminas agredidas fueron auxiliadas por otro vehículo conducido por uno de sus familiares y trasladadas hasta las instalaciones del Hospital General en la colonia Juárez, al que ingresó el identificado como Rosendo Garay, quien según investigadores, cuenta con carpetas de investigación por narcomenudeo desde 2011 y por robo de vehículo con violencia. Se le ubica como parte de la estructura del Cártel de Sinaloa en Tecate, al que pertenece y en el que funge como cabecilla otro familiar de las víctimas -El Chicho-, mano derecha de Jesús Rafael Yocupicio alias El Cabezón, líder del Cártel de Sinaloa en Tecate y parte de Tijuana.
La segunda mujer lesionada, identificada como Luz, tiene antecedentes de un intento de privación de la libertad en 2018, relacionadas ambas con Iván Méndez, asesinado y calcinado el 5 de noviembre, quien según ficha de búsqueda emitida por colectivos de la localidad, desapareció el 1 de noviembre, cuando se dirigía a su trabajo.
En su edición anterior, ZETA informaba de los múltiples ataques armados que registra Tecate a plena luz del día, que han dejado más de 100 homicidios en lo que va del año, además de 50 nuevas fichas de desaparición entre hombres y mujeres.