Francisco Pérez Tejada fue alcalde de Mexicali en la época en que su partido, PRI, comenzó a ser oposición de 1992 a 1995. Justo en ese año fue candidato del tricolor al Gobierno del Estado, pero como la anterior nominada priista y hasta la fecha, perdió la elección. Se la ganó el panista Héctor Terán Terán. De ahí, Pérez Tejada entró en el ostracismo político, en la ignominiosa caída electoral del Revolucionario Institucional en el país, hasta que su hijo, Francisco Pérez Tejada Padilla, de cuna priista, ganó para el tricolor la Capital de Baja California y gobernó la ciudad de 2010 a 2013. Un tercer Pérez apareció en el sexenio de Enrique Peña Nieto, pero arropado por el Partido Verde Ecologista de México: David Pérez Tejada Padilla fue diputado federal de 2012 a 2015. Priistas de viejo cuño como muchos de sus iguales, rápido se acomodaron en los triunfos de Morena. Se sabe que Francisco ha contribuido en las campañas de la hoy gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda y de la recién reelecta alcaldesa de Mexicali en el área financiera. Al viejo estilo del PRI, goza de presumir estar tras bambalinas, suponiendo ser la mano que mece la cuna o en el coyotaje político, pero con el interés más guinda que tricolor. Hace unos días, su hermano David renunció al Instituto Nacional de Migración que encabezaba en el Estado por parte del Gobierno Federal, luego de denuncias y detenciones de agentes migratorios por extorsiones a migrantes extranjeros. Los tres Pérez fueron invitados de honor a la toma de protesta de la morenista Norma Bustamante en Mexicali el 30 de septiembre, y vaya, de derrotados priistas, entraron como erguidos morenistas por la puerta grande. Qué cosas…
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