Por más de dos semanas, la Secretaría de Seguridad Ciudadana de Baja California ha controlado la operatividad en el Valle de Mexicali. Fuera el ex director municipal Mendívil, ¿devolverán la responsabilidad a Felipe Chan?
La delincuencia organizada tiene nombre y apellido en el Valle de Mexicali, se encuentra catalogada y definida como una extensión del Cártel de Sinaloa y es representada por Los Rusos, aquel grupo delictivo que el ex secretario de Seguridad, Gilberto Landeros Briceño, consideró el principal objetivo en una entrevista para ZETA.
Por este grupo delictivo y la supuesta colusión de la delincuencia organizada en la operatividad de la Zona Sur del Valle de Mexicali -de la cual no se tiene duda-, el General Leopoldo Tizoc Aguilar Durán decidió tomar las riendas de la seguridad en este punto del municipio que alberga la Capital del Estado.
La zona integrada por Ciudad Guadalupe Victoria y todas las pequeñas comunidades ubicadas al Sur de la misma, hasta el Oviedo Mota Reacomodo y Colonias Nuevas, son parte de esta fortaleza de la delincuencia organizada que se extiende por todo el Valle de Mexicali y prácticamente la zona conurbada de la ciudad.
Aguilar Durán tomó el control, se le concedió el derecho de suspender temporalmente de sus funciones a los más de 160 elementos de la Policía Municipal que patrullaban en esa zona y los sustituyó por un grupo de menos de la mitad de agentes de la Fuerza Estatal de Seguridad Ciudadana (FESC) para mantener la seguridad en ese punto.
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En una conferencia de prensa a inicios de septiembre, el secretario, acompañado de la fiscal estatal María Elena Andrade y del secretario general de Gobierno, Alfredo Álvarez, anunciaron que en tanto se realizaban todos los Exámenes de Control y Confianza a los más de 160 agentes, el control de la seguridad estaría a cargo de la FESC, con la promesa de que en un periodo de cuatro o cinco días concluirán las investigaciones.
A menos de que se refiriera a la duración de días del planeta Mercurio, donde el alba y ocaso se dividen por mil 408 horas, la realidad es que ya se excedieron, pues desde hace más de dos semanas, los elementos de la Policía Municipal no tienen acceso a armas, a patrullas ni a ninguna diligencia en ese cuadrante del Valle de Mexicali.
El motivo, un posible involucramiento de la delincuencia organizada, pero también una falta de confianza para la operatividad del General a Pedro Mendívil -la cual era recíproca-, y ahora, con la nueva gestión de Luis Felipe Chan, sigue sin haber una fecha definida para devolver la operatividad de la zona.
¿Qué es lo que se espera para volver a la normalidad?
La gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda, ya anunció que independientemente de los resultados de C3, los mandos del Valle de Mexicali deberán sustituirse, lo cual vuelve intrascendentes los resultados de los propios exámenes, pues la decisión ya estaba tomada desde el momento en que se anunció el operativo.
Eventualmente deberán enfrentar una realidad en el Poder Ejecutivo, no hay forma en que puedan garantizar la seguridad de la ciudadanía sin el apoyo de la Policía Municipal, puesto que su fuerza operativa duplica a la de la FESC en toda la entidad.
Mientras el secretario se decide, la violencia regresó al Valle de Mexicali, pues sólo en los primeros días de la gestión de Chan Baltazar se han registrado cuatro personas asesinadas en ese punto de Mexicali.
Ya no están Mendívil ni la corporación de Mexicali en esa zona, ¿cómo explicar eso? Quizá después de esto puedan entender que el verdadero responsable de la criminalidad es la delincuencia organizada que no se esconde.
