El caso de la niña Kim, quien presuntamente fue agredida sexualmente dentro de las instalaciones del jardín de niños Graciano Viniegra, ubicado al Poniente de Mexicali, ha escalado de tono y la familia encontró refugio en padres de familia enardecidos por el terrible episodio que vivió la infante de apenas 3 años de edad.
Desde la semana pasada circuló información en redes sociales a través de la cuenta de una madre de familia de nombre Dulce, quien hizo público un audio donde se escuchaba el episodio desgarrador en el que una niña se negaba a ser revisada, debido al dolor y el miedo que vivía por exponer la agresión de la que fue víctima.
Tras presentar el audio y la denuncia ante la Fiscalía General del Estado (FGE), el caso se viralizó en cuestión de horas, provocando la respuesta de autoridades.
Este martes 17 de septiembre, familiares y padres de familia, se unieron al activismo en favor de la niña de 3 años, y decidieron tomar las instalaciones del jardín de niños, donde además de cerrar las puertas colocaron un gran número de pancartas y cartulinas, con mensajes alusivos a una justicia que pareciera insuficiente por el dolor causado.
“Los niños no se tocan” y “justicia” son parte de los reclamos que podían leerse y escucharse durante la primera protesta que se llevó a cabo en las instalaciones de la escuela. Sin embargo, la movilización se extendió hasta las instalaciones de la FGE ubicada en Río Nuevo de Mexicali, donde la madre de la víctima fue citada para presentar su declaración.
No fue sola, pues un gran número de familiares y padres de familia se unieron a las protestas e ingresaron a las oficinas de la FGE.
La presencia y el reclamo se hicieron acompañar también de consignas contra la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda, a quien le reprocharon que no estaba presente debido a que estaba inaugurando un parque del otro lado de la ciudad.
Algunos padres sugerían exhibir el rostro del agresor, pero también reclamaban justicia en contra de la directora y administrativos, toda vez que no activaron los protocolos para indagar en el caso. Por el contrario, todo parece indicar que intentaron ocultar el crimen e incluso -según refieren los manifestantes- intentaron inhibir a los padres de familia para no asistir a la huelga.
