¿País de leyes? ¿Actividades reglamentadas para funcionarios y ciudadanía? Si observamos desde el entorno municipal hasta el federal, se pensaría que los documentos rectores quedaron en archivos muertos o en bibliotecas. Por todas partes se observa el incumplimiento.
En Baja California hace pocas semanas vimos cómo un pequeño grupo de ciudadanos, se plantaron afuera de las instalaciones de PEMEX en Playas de Rosarito, para llamar la atención de las autoridades. Con esa protesta, causaron problemas a los automovilistas de la región que se vieron impedidos de llenar de gasolina los tanques y cumplir actividades cotidianas. ¿Quién pagó las consecuencias? Ciudadanía sin vela en el entierro.
Hace unos días numerosos grupos pobladores de Tlahuapan, cerraron la autopista México-Puebla para exigir un pago que desde los años 60 el gobierno federal les debe por el incumplimiento del pago de sus tierras que fueron expropiadas para la construcción de dicha vía que benefició también a distintas poblaciones de Tlaxcala y Veracruz.
¿Vieron el caos que se propició? Y los miles de millones de pesos que se perdieron ante la inmovilización de los transportes de carga, públicos y privados. Y también se dejó oír la respuesta firme y constante del Presidente López Obrador de no hacer caso, o lo que es lo mismo, no aceptar la exigencia de los que se sienten defraudados desde años atrás. Una vez más pagaron justos por pecadores.
Y se preguntará usted, amable leyente, ¿a qué viene eso que ya sabemos y nos lastima? Pues resulta que en los últimos meses en los círculos sociales o familiares se escuchan las críticas a los poseedores de estacionamientos privados o comerciales. Cómo sufren las consecuencias en sus bolsillos, que no reciben suficientes ganancias, han decidido actuar en su defensa y a juzgar por la rapidez que están aumentando las tarifas, no lo solicitan a las autoridades municipales y “por sus pistolas” (arma letal y de moda) cada que se les antoja, suben las tarifas.
Ni siquiera cumplen con alguno de los muchos requisitos que señala el Reglamento, como un terreno pavimentado o por lo menos con gravilla, contar con un seguro vigente contra robo o daños, tener un equipo mínimo de extinguidores para prevención de siniestros. Ahora cualquiera ofrece estacionamientos privados sin cumplir requisitos mínimos de seguridad.
¿Y qué hace el Departamento de Reglamentos? ¡Nada, absolutamente nada!
Nota 1. Restaurantes de postín, especialmente de Zona Río, estacionamiento que antes ofrecían gratuitamente como compromiso, ahora lo cobran exageradamente. ¿Quién los regula? ¡Nadie!
Nota 2. Hace años en Plaza Río, cobraban mucho. Hubo protestas y ahora tienen tarifas justas. Todo comercio debe ofrecer estacionamiento gratuito.
Nota 3. Confiemos que los próximos cabildos pongan atención en eso.
Luz Elena Picos es directora de Red Social de Tijuana.
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