El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, informó este viernes 19 de julio que la siguiente semana enviará una carta al candidato a la presidencia de Estados Unidos por del Partido Republicano, Donald Trump, para decirle que los migrantes no llevan droga a ese país y que “no resuelve nada cerrar la frontera”.
El día de ayer con motivo del cierre de la Convención Republicana, acto celebrado en Milwaukee y en el que Donald Trump aceptó su nominación como candidato, afirmó que en caso de llegar a la presidencia pondrá fin a la migración ilegal, terminando de construir el muro fronterizo que empezó a edificar durante su mandato como presidente (2017-2021).
Aseguró que como parte de la migración a Estados Unidos, a ese país arriban personas que estuvieron encarceladas o en instituciones mentales, terroristas incluidos. Propuso que si alguien decide migrar a esa nación lo haga de manera legal.
“Le voy a demostrar de que los migrantes no llevan droga a Estados Unidos, que esa es una vil mentira, que los migrantes van a Estados Unidos a trabajar honradamente y que esa nación se constituyó y se convirtió en una potencia gracias a los migrantes de todo el mundo, que llegaron e hicieron un país muy próspero”, refirió López Obrador en su conferencia de este viernes.
“Eso se debe de aclarar y también informarle que nos ayuda la integración económica (entre Estados Unidos, México y Canadá) y que no resuelve nada con cerrar la frontera, es más, no se puede, ni se debe ni se puede”, agregó.
Sostuvo que dejar de fabricar automóviles en México y fabricarlos en Estados Unidos implicaría un aumento el precio de la unidad para los norteamericanos.
“Lo que están diciendo, de que se pueden construir los automóviles en Estados Unidos significaría que en promedio cada automóvil que se venda en Estados Unidos le costaría al ciudadano estadounidense entre quince y veinte mil dólares más. No se aguantaría la frontera cerrada un mes, no lo aguantarían ni los productores ni los fabricantes ni los inversionistas de Estados Unidos, ni los trabajadores de Estados Unidos, también nos afectaría a nosotros, pero les afectaría más a ellos”.
Denominó a Donald Trump su “amigo” y lo calificó como “un hombre inteligente, con visión”. De ahí que asumiera que el candidato republicano “va a cambiar su manera de pensar”.
Aseveró que en su calidad de primer mandatario fue el primero en lamentar al atentado del que fue víctima Donald Trump el sábado 13 en Pensilvania.
“Lamentamos mucho lo que le pasó y a lo mejor no le han informado, pero fuimos los primeros en el mundo como autoridad, en ningún caso un jefe de Estado, un presidente, un primer ministro desaprobó la acción, casi de inmediato. Cuando todavía no había certidumbre de lo que había ocurrido nosotros ya estábamos condenando el hecho”, indicó.
“A lo mejor me equivoco, pero no, fuimos los primeros, por amistad y porque estamos en contra de la violencia, como no sabíamos a ciencia cierta lo que había sucedido le puse al mensaje: sea como sea, rechazamos la violencia por irracional”, asentó.