Bertha Xóchitl Gálvez Ruiz -candidata a la Presidencia de la República de los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD), que integran la coalición “Fuerza y Corazón por México”- reconoció, pasadas las 01:00 horas de 3 de junio de 2024, su derrota y el triunfo electoral de Claudia Sheinbaum Pardo, candidata presidencial de la coalición “Sigamos Haciendo Historia”, integrada por los partidos Morena, del Trabajo (PT), y Verde Ecologista Mexicano (PVEM).
“Ser su candidata ha sido el honor más grande de mi vida. Siempre contarán conmigo como una guerrera que luchará por un país en el que se respete la vida, la verdad y la libertad. ¡Vamos adelante y viva México!”, escribió la política hidalguense, en su cuenta de la red social X, donde también adjunto un video de la transmisión en vivo de una conferencia de prensa.
La senadora con licencia estuvo acompañada de Marko Martín Cortés Mendoza, Rafael Alejandro Moreno Cárdenas y José de Jesús Zambrano Grijalva, presidentes de los comités ejecutivos nacionales de los partidos Acción Nacional, Revolucionario Institucional y de la Revolución Democrática, respectivamente.
Luego de decir que las tendencias no le eran favorables y que “parecían ser irreversibles”, Gálvez Ruiz señaló que se comunicó con Sheinbaum Pardo, para reconocer el resultado electoral, pero dijo que ello venía acompañado “de una firme exigencia de resultados y soluciones a los graves problemas del país y del indispensable respeto a la Constitución y las instituciones democráticas”.
Asimismo, la política hidalguense enfatizó que saldrían a la calle, “las veces que tengamos que salir”, para defender a la República y la democracia. También que tenía diferencias con el programa de gobierno promovido por Morena, por lo que y sus aliados. Por ello, dijo, que en adelante, desde la oposición, continuaría ejerciendo una labor vigilante, criticando lo que no estuviera bien, proponiendo soluciones realistas a los problemas y defendiendo las causas en las que sinceramente creía.
Entre ellas, el apoyo a las madres buscadoras, la lucha de las mujeres, los derechos de los pueblos indígenas, el combate a la corrupción, y, “por supuesto”, el impulso a las energías limpias. Gálvez Ruiz agregó que ahora venía una nueva fase, de dejar atrás el encono propio de las campañas, para pasar a la reconciliación, en que se privilegiara lo que era común entre los mexicanos.
Sin embargo, la política hidalguense acusó que el que pasó, fue un proceso electoral “profundamente inequitativo”, marcado por la intervención “sistemática” del Poder Ejecutivo y el uso “faccioso” de los programas sociales, además que, según ella, fue el proceso electoral más violento en la historia del país.
Por último, antes de decir “nos vemos en tres años o en seis”, la senadora con licencia agradeció a los ciudadanos que votaron por ella, a los militantes y dirigentes del PAN, PRI y PRD, a los “xochilovers” y a los integrantes de la llamada “marea rosa”.