Vladímir Vladímirovich Putin ganó, el 17 de marzo de 2023, las elecciones presidenciales rusas, con el 87.97 por ciento de los votos -con el 24.4 por ciento de los colegios electorales escrutados-, según los primeros resultados oficiales tras el cierre de las urnas, citados por agencias estatales.
El actual titular del Kremlin -de 71 años de edad- estará al frente de dicho país al menos hasta 2030, pero, todavía puede aspirar a una reelección más para seis años, según la reforma constitucional que en 2020 se hizo por y para él. De esta manera, después de llegar a la presidencia de Rusia en 1999, podría gobernar dicho país hasta el 2036, es decir, que duraría un total de 37 años al frente del poder político ruso.
Putin es presidente de la Federación de Rusia desde 2012, y anteriormente desde 2000 hasta 2008. También fue presidente del Gobierno, de 1999 a 2000, y nuevamente de 2008 a 2012. Asimismo, fungió como vicepresidente del Gobierno, del 9 de agosto de 1999 al 16 de agosto de 1999.
Antes se desempeñó como Director del Servicio Federal de Seguridad, mejor conocido por sus siglas en ruso, como la FSB, la institución sucesora del Comité para la Seguridad del Estado (KGB), de la época soviética.
La Corte Penal Internacional (CPI) dictó, el 17 de marzo de 2023, una orden de detención contra el presidente de Rusia, Vladimir Putin, por ser el supuesto responsable de crímenes de guerra cometidos por tropas rusas en Ucrania.
Los colegios electorales cerraron en Moscú a las 17:00 GMT (11:00 horas, tiempo de Ciudad de México), tras tres días marcados por actos vandálicos en centros de votación, donde estaban convocados a sufragar un total de 112 millones de personas, en los octavos comicios presidenciales en la historia de Rusia.
La Comisión Electoral Central de Rusia informó, también, que la participación ciudadana fue del 73.33 por ciento, y rozó el máximo histórico en unas elecciones presidenciales, que era de 74.66 por ciento, en 1991. En esta ocasión, los electores rusos pudieron emitir su sufragio en tres modalidades: con una papeleta y electrónicamente, desde una terminal o a distancia, a través de internet, recibiendo un total de 8 millones de votos.
Las primeras elecciones presidenciales de Rusia se realizaron el 12 de junio de 1991 en la aún República Socialista Federativa Soviética de Rusia para escoger al presidente de esa república de la URSS, que luego se convertiría en Presidente de la Federación Rusa. El candidato ganador fue Boris Yeltsin, candidato independiente.
No obstante, en una acción denominada “Mediodía contra Putin”, los rusos que se oponen al líder del Kremlin acudieron a algún colegio electoral local, para estropear su papeleta o votar por uno de los tres candidatos que se oponían al presidente de Rusia.
Otros escribieron el nombre del difunto el líder opositor ruso Alexéi Navalni, quien murió, el 16 de febrero de 2024, de manera repentina, en la prisión ártica IK-3, ubicada en la localidad rusa de Jarp -distrito autónomo Yamalo-Nénets-, en la que se encontraba desde diciembre de 2023.
Los aliados del líder opositor ruso difundieron videos de filas de personas en distintos colegios electorales de Rusia que, según dijeron, estaban allí para protestar pacíficamente. El periódico independiente Novaya Gazeta calificó la acción como el “testamento político de Navalni”.
En el resto del mundo también se formaron filas de personas ante las sedes de las embajadas de Rusia, con multitudes especialmente numerosas en París, Francia, y Berlín, Alemania, donde decenas de miles de rusos viven exiliados.
La viuda de Navalni, Yulia Navalnaya, se unió a la fila en la capital alemana. A su alrededor, algunos llevaban pancartas en las que se podía leer “No a Putin, no a la guerra” y “Putin es un asesino”.
Por su parte, Leonid Volkov, estrecho colaborador de del opositor ruso dio las gracias a los que mostraron su oposición. “El mundo les ha visto. Rusia no es Putin, Rusia son ustedes”, escribió en su cuenta de la red social X.
Sin embargo, la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, presentó las largas filas ante las embajadas de Rusia, como una prueba de apoyo al Kremlin. Con la muerte de Navalni, además de que las principales figuras de la oposición están en la cárcel o en el exilio, Putin se quedó con tres rivales en las urnas, los diputados de la Duma: el ultranacionalista Leonid Slutski, el comunista Nikolai Jaritonov y el liberal Vladislav Davankov.
El segundo candidato más votado fue Jaritónov, con 4 por ciento de los votos, seguido por el representante del partido Gente Nueva, Davankov, con 3.86 por ciento. El último aspirante era el ultranacionalista Slutski, que sumó el 3 por ciento de las papeletas a su favor.
Putin se presentó como candidato independiente, promovido por un grupo de ciudadanos, mientras los partidos con representación en la Duma, que postularon a sus propios candidatos, no consideraron necesario mandar observadores a los colegios electores a lo largo del país. Tampoco hay observadores internacionales, sin contar a los invitados extranjeros del propio Gobierno ruso.
Los dos únicos aspirantes que se pronunciaron por el fin de la invasión a Ucrania, que inició el 23 de febrero de 2022, recibieron el veto de la Comisión Electoral Central rusa. La joven periodista Yekaterina Dundtsova, hace tres meses, y el político Boris Nadezhdin, el mes pasado, ambos excluidos al anular por irregularidades las firmas de apoyo a su candidatura.