Avril Danica Haines, directora de Inteligencia Nacional del Gobierno de Estados Unidos, declaró, el 11 de marzo de 2024, ante el Senado de EE.UU., que algunas partes del territorio de México estaban bajo control de los cárteles del narcotráfico.
“Creo que no hay duda que es un reto para el Gobierno de México enfrentar a los cárteles. hay partes del país que efectivamente están bajo el control de los cárteles en ciertos respectos”, expresó la funcionaria federal estadounidense, en respuesta a una pregunta de Angus S. King Jr., senador independiente por Maine, quien calculó que sólo en la hora 20 minutos que llevaba la audiencia, 15 personas habrían muerto en EE.UU. por sobredosis de fentanilo.
Las declaraciones de la directora de Inteligencia Nacional del Gobierno de Estados Unidos, fueron realizadas durante la presentación del informe respecto a la “Evaluación anual de amenazas 2024”, del Comité de Inteligencia de EE.UU.
Que agrupa a 16 agencias, entre ellas la Agencia Central de Inteligencia (CIA), el Buró Federal de Investigación (FBI), la Administración para el Control de Drogas (DEA) y la Oficina de Terrorismo e Inteligencia Financiera (TFI), todas por sus siglas en inglés.
No obstante, Haines destacó que las autoridades de Estados Unidos participaban para apoyar al Gobierno mexicano, en el combate al crimen organizado en México, que según la funcionaria federal estadounidense, era el principal productor y proveedor de drogas ilícitas al mercado de EE.UU.
“Al mismo tiempo, nosotros diríamos que nuestra cooperación con ellos [el Gobierno de México] ha mejorado con el tiempo. Pero esta es un área en la realmente hemos podido trabajar con ellos para tratar de ayudar [en la lucha contra los cárteles del narcotráfico]”, agregó Haines.
Acompañada del director de la CIA, Bill Burns, así como el del FBI, Christopher Wray, la directora de Inteligencia Nacional de EE.UU. confirmó, además, que la amenaza que representaba el tráfico de drogas estaba a niveles históricos.
“La amenaza de las drogas ilícitas permanece en niveles históricos, ya que las organizaciones criminales transnacionales en México suministran y mueven grandes cantidades de opioides sintéticos, como el fentanilo, hacia Estados Unidos”, señaló Haines al presentar su testimonio, durante una comparecencia ante el Comité de Inteligencia del Senado de EE.UU.
“La fragmentación de las operaciones de fentanilo ha dificultado los esfuerzos de disrupción. Algunos aspectos de la producción de fentanilo se están extendiendo a Estados Unidos, donde los narcotraficantes llevan a cabo las etapas finales del envasado”, detalló el informe.
Por su parte, Christopher Wray, director del FBI, afirmó que el Gobierno de Estados Unidos había incautado una gran cantidad de fentanilo en la frontera con México, que podría matar hasta 270 millones de personas.
“Las drogas llegan por una variedad de métodos, incluyendo los puertos de entrada, la parte del reto del fentanilo es que las drogas son pequeñas y fáciles de ocultar, y lo fácil que es innovar su trasiego a lo largo de la frontera”, detalló Wray.
“La vasta mayoría del fentanilo que está matando a los estadounidenses, claro, viene a través de México y la vasta mayoría de los precursores químicos para elaborarlo provienen de China”, dijo, en su turno, el director del Buró Federal de Inteligencia.
Durante otra parte de la comparecencia ante el Comité de Inteligencia del Senado de EE.UU., el director de la CIA advirtió respecto a una supuesta red de tráfico de personas en la frontera entre México y Estados Unidos, con conexiones con el Estado Islámico (EI).
“Existen redes de tráfico de migrantes dirigidas por personas vinculadas al Estado Islámico o a otras organizaciones terroristas?”, preguntó el senador republicano por Florida, Marco Antonio Rubio, al director del FBI.
“Hay una red en particular con algunos facilitadores extranjeros […] que tienen vínculos con ISIS, lo que nos preocupa mucho”, contestó Wray, usando el acrónimo en inglés del EI. Sin embargo precisó que no podía dar detalles en sesión abierta. “Hemos dedicado un enorme esfuerzo a la investigación con nuestros socios respecto a”qué está haciendo esa red”, añadió.
El presidente Andrés Manuel López Obrador negó, el 18 de marzo del 2021, los dichos del general Glen David VanHerck, jefe del Comando Norte de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, quien acusó que los problemas que existen en la frontera sur de su país, en temas de tráfico de personas y narcotráfico, se debían a fallas del Gobierno de México, que sólo gobernaba entre el 70 y el 65 por ciento de su territorio.
“No es cierto lo que se sostiene, pero respetamos las opiniones de todos. Nosotros vamos a seguir teniendo buenas relaciones con el Gobierno de Estados Unidos, no nos vamos a pelear con el Gobierno de Estados Unidos”, dijo el mandatario nacional, durante su conferencia de prensa matutina.
El titular del Poder Ejecutivo Federal fue cuestionado respecto a si su homólogo Joseph Biden le había pedido apoyo respecto a dicho tema, el político tabasqueño dijo que no. “Él es muy respetuoso con nosotros y no nos metemos. El respeto al derecho ajeno es la paz”, agregó el mandatario nacional.
“El problema más amplio, cuando digo síntoma [es] la lucha contra el narcotráfico, migración, trata de personas, todos son síntomas de organizaciones criminales transnacionales que operan a menudo en áreas no gobernadas, del 30 al 35 por ciento de México, que está creando algunas de las cosas con las que nos enfrentamos en la frontera”, comentó VanHerck, el 17 de marzo del 2021.
Durante una conferencia de prensa realizada en el Pentágono -sede del Departamento de Defensa de los Estados Unidos, ubicado en el Condado de Arlington, Virginia, cerca de Washington D.C.-, el mando militar comparó la falta de gobernabilidad en algunas zonas de México, con lo que sucedía en China y Rusia, donde, según él, aprovechaban las fallas gubernamentales para generar inestabilidad en dichas zonas.
“Lo que vemos en la frontera sur es una compilación de múltiples cosas, no es una sola, lo que ha impulsado lo que estamos viendo respecto a la migración a este país”, insistió VanHerck, quien añadió que la pandemia por la COVID-19, aunada a los problemas de narcotráfico en México y los países de Centroamérica, “son indicadores y razones” por las cuales la gente se dirigía a EE.UU.
“Creo que es un imperativo de seguridad nacional que debemos considerar [los problemas en la frontera con México]. Y la razón por la que lo veo así, desde la perspectiva de la defensa nacional, es que crea vulnerabilidades y oportunidades potenciales para los actores de todo el mundo”, añadió VanHerck.
Aunque el general no quiso afirmar que existía una crisis en la frontera con México, reconoció que este problema llevaba al menos un año, es decir, el último de la Administración del ex presidente Donald Trump.
Antes, durante una comparecencia en el Comité de Servicios Armados del Senado estadounidense, VanHerck calificó como “fantástica” la cooperación con las Fuerzas Armadas mexicanas, pero subrayó los riesgos de inestabilidad creada por el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
“Hay dos importantes organizaciones criminales transnacionales, Sinaloa y Jalisco Nueva Generación. Tenemos un imperativo de seguridad nacional dada la inestabilidad que estas crean, las tragedias que provocan y las oportunidades que crean para que actores malignos como China y Rusia, directamente en nuestra frontera sur, para tener acceso e influencia”, apuntó el mando militar estadounidense.
“Desde el punto de vista [de nuestra relación] con los mexicanos, ellos son tremendos socios, tenemos una relación fantástica de militar a militar. Han sido grandes socios”, aseguró VanHerck, al ser cuestionado por Thom Thillis, senador republicano por Carolina del Norte, respecto a dicho tema.
Según VanHerck, la relación del Comando Norte de EE.UU. con los militares mexicanos se había mantenido de forma cercana, a través de encuentros virtuales durante la pandemia de la COVID-19, además de que había oficiales de México destacados en su sede de Colorado Springs, en Colorado.