A ocho años de su fundación, el objetivo de la Escuela de Formación Escénico Vocal Ja’sit es otorgar herramientas que ayuden al desarrollo musical integral de los estudiantes.
Fuera de tradicionalismos, la academia establecida en el Centro de Artes Musicales (CAM) ejerce como una ventana hacia la profesionalización ante la austeridad cultural por parte del actual gobierno.
“Somos una escuela especializada en cantantes, no recibimos instrumentistas, sólo cantantes, la única en el país en ser tan detallada y permitir esa diversificación”, mencionó a ZETA Lucía Gudiño Aguilar, coordinadora académica de Ja’sit, institución de la que nuevos cantantes profesionales egresaron de la Licenciatura en Canto de la Escuela de Formación Escénico Vocal, con posibilidades de incursionar en la dirección coral, coordinando centros de producción musical, produciendo espectáculos multidisciplinarios, la investigación y docencia de la música y el canto.
“Estudiar música es difícil, hay tanto que aprender del lenguaje musical, porque no solamente es cantar bonito, debemos entender lo que hace nuestro cuerpo cuando vocaliza, las expresiones, respiración. Eso es sólo una parte de este gran proceso académico”, expuso a este Semanario José Luis Villarreal, quien, junto a Belén Berenice Marín, Lorena Oronia Contreras y Rodolfo Jiménez se convirtieron en los nuevos cantantes profesionales de Baja California.
“Es una experiencia positiva, realmente en el Estado hay pocas escuelas que te ayuden en la formación profesional en cuanto al canto, y referente al tema laboral, si se busca, Tijuana puede ser una ciudad con gran campo. Hay casos de éxito y eso da muestra que la academia funciona bien”, precisó Jiménez.
Por su parte, Marín, quien estudia la especialización en Ópera, resaltó la falta de énfasis al seguimiento profesional: “Te topas con un medio complicado, en general en todo México, pero en Baja California carecemos de programas que apoyen las artes. Por eso se opta por dar clases y olvidarse un poco de los proyectos personales. Casi siempre todo es por tus propios medios, porque para ejercer tal cual como un cantante de ópera y tener un sueldo fijo, no existe”.
En cuanto a la falta de apoyos por parte de autoridades, Gudiño Aguilar agregó: “En ninguna economía del mundo el arte es la prioridad número uno. Ahorita estamos batallando en nuestro país, podría decir sin temor a equivocarnos que hay una crisis económica. El arte para nada es una prioridad que tampoco depende de Ja’sit, es más una responsabilidad de las autoridades competentes y de todos como sociedad. Como maestra pongo el grano de arena con mis alumnos y una formación completa.
Para Luis Villarreal, maestro de canto de jóvenes de bachillerato, “es increíble que hasta hace ocho años no teníamos una licenciatura de música en Tijuana, lo que sigue afectando es que no hay espacios para ejercer, no tenemos gran apoyo, a la gente que está en esos puestos de cultura no les interesa, siempre estamos topándonos con pared, no hay cómo solventar gastos si queremos hacer eventos, renta de músicos, instrumentos, de complejos como el CEART”, reflexionó.
Más allá del seguimiento a egresados por parte de Ja’sit, la realidad es que la cultura no resalta en la agenda, hecho que afecta a cualquier disciplina artística.
“Lamentablemente, entre más jóvenes las personas, su cultura musical es más limitada, no conocen más allá de lo que hay en la radio y plataformas, no hay interés por los compositores clásicos, de comedia musical, música popular que se hacía en los 70, sólo se limitan al reggaetón y a Peso Pluma. Ese es el reto que enfrentamos” abundó Gudiño Aguilar, quien afronta el futuro de dicha formación para hacer del canto una profesión. Para concluir, este mes Ja’sit llevará a cabo un proceso de selección de alumnos de nuevo ingreso para su Licenciatura en Canto, iniciando clases en enero de 2024. Mayor información disponible en la convocatoria, la cual puede consultarse en www.jasit.org
