En este verano de estrenos imperdibles, no podía faltar la secuela a la película de acción y ciencia ficción del 2018. Si en la primera entrega, el súper depredador del mar aparecía por primera vez en pantalla, en “Megalodón 2: El gran abismo”, descubrirás que hay criaturas más peligrosas que un megatiburón prehistórico de 25 metros (y no serán los tres ejemplares que aparecen en el trailer).
Para este largometraje, Jason Statham vuelve en el papel de Jonás Taylor, un buzo de rescate que ahora se dedica a la protección de los océanos en la compañía fundada por Jiuming (Wu Jing), el hijo menor del Dr. Zhang -fallecido en la primera película- y hermano de Suying, personaje que ya no aparece en esta secuela, pero cuya hija, Meiying (Shuya Cai), ahora vive bajo el cuidado de Jonas.
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A pesar de las dudas que generan las películas con animales gigantes (consecuencia de
“Sharknado”, “Anaconda”, y sagas similares) por el decaimiento de los efectos especiales y argumentos cada vez más inverosímiles, lo cierto es que “Megalodón 2” se salva de caer en lo absurdo; al contrario, se presenta como una concatenación de tragedias ocasionadas por el egoísmo humano, manteniendo la tensión sobre el desenlace de la historia y la posible continuación con alguna de los seis libros restantes de la serie de novelas de Steve Alten. (Andrea López González).
