Alejandra Aguilar Solórzano, hija de un militar retirado y socia de Protective Materials Technology (Promatech), empresa proveedora de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), vendió al general Luis Crescencio Sandoval González, titular de dicha institución, un departamento de 407 metros cuadrados, ubicado en el fraccionamiento Bosque Real, en el municipio de Huixquilucan, Estado de México, con valor real de al menos 30 millones de pesos.
Dos años después de la citada transacción, la empresa proveedora obtuvo un millonario contrato de la Sedena, según reveló, el 15 de mayo de 2023, una investigación de la organización no gubernamental Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI).
En su declaración patrimonial de mayo de 2022, el titular de la Sedena reportó a la Secretaría de la Función Pública (SFP), que el valor de adquisición del departamento fue de nueve millones de pesos, pero MCCI corroboró que inmuebles de dimensiones y características similares, en el mismo fraccionamiento, son vendidos hasta en 30 millones de pesos.
“El titular de la Sedena tiene un sueldo neto mensual de 119 mil pesos mensuales. Para adquirir una propiedad similar debería reunir su sueldo íntegro durante más de 20 años”, señaló la investigación de la ONG, firmada por los periodistas José Raúl Olmos Castillo y Verónica Ayala.
Sandoval González solicitó a la SFP no dar información sobre sus bienes inmuebles. Sin embargo, MCCI obtuvo copia de la declaración completa, sin omisiones, que el general entregó a la Secretaría de la Función Pública, en la cual consta que el 17 de febrero de 2020, una persona física, de nombre Alejandra Aguilar Solórzano, le traspasó la propiedad de un departamento de 407 metros cuadrados, en el cuarto piso de un edificio ubicado sobre el Bulevar Bosque Real.
En su declaración patrimonial entregada a la SFP, Sandoval González reportó que el valor de la adquisición del departamento fue de 9 millones de pesos, y que lo compró con un crédito hipotecario otorgado en febrero de 2020, por el Banco Nacional del Ejército (BANJÉRCITO).
Según la ONG, hasta mayo de 2022, del crédito original de nueve millones de pesos, el general ya había pagado la mayor parte y su saldo era de tres millones 874 mil pesos. Además, indicó que la empresa tiene como socias a Alejandra Aguilar Solórzano y a su hermana Elisa, cada una con el 50 por ciento de las acciones. Ambas son hijas de Alfredo Aguilar Amezcua, un militar retirado que es apoderado legal de la compañía.