La gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila Olmeda rechazó las declaraciones de la alcaldesa de Tijuana Montserrat Caballero Ramírez en las que responsabiliza al fiscal general del estado, Ricardo Iván Carpio de su integridad tras el ataque que sufrió su escolta el pasado jueves 17 de mayo, pues según la mandataria estatal la edil municipal ni siquiera asiste a las mesas de seguridad.
“Ella es presidenta municipal de Tijuana, una ciudad con características muy endógenas de la propia ciudad y por supuesto con una estrategia de seguridad para un municipio como este. Asumimos la parte que le toca al Gobierno del Estado. En prácticamente todo el Estado está funcionando -estrategia de seguridad- es la excepción Tijuana, es donde tenemos el mayor reto, se lo he dicho al secretario -de seguridad- Fernando Sánchez en las mesas de seguridad donde no acude la alcaldesa. Yo tengo mesas de seguridad todos los días y la alcaldesa son pocas a las que ha asistido presenciales y de zoom”, declaró la gobernadora.
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No obstante, Marina del Pilar condenó el ataque al escolta de la presidenta municipal y reiteró su apoyo, aunque dejó en claro que no está de acuerdo con los señalamientos realizados.
“En primer lugar condenar los hechos violentos que se han vivido en Tijuana durante fechas recientes y lo ocurrido con el escolta de la alcaldesa el día de ayer. La alcaldesa de Tijuana siempre va a contar con el apoyo de la gobernadora, del Gobierno del Estado y de la Fiscalía General del Estado, de manera inmediata dimos instrucciones para apoyar a lo sucedido. No estamos de acuerdo con las declaraciones que ella realiza, hay que asumir las responsabilidades que cada quien tiene. Ese tipo de señalamientos no le abonan a la coordinación a la comunicación para construir la paz que requiere Tijuana y el Estado”, declaró.
Y agregó “asumo las responsabilidades que tengo como gobernadora y no le ando aventando la bolita siempre a otros, que si la calle hay es que el Estado; que si el puente, no es que el Estado; que si la seguridad, es que la Federación y el Estado; y nunca se hacen responsables de lo que les toca y de las funciones que tenemos cada uno como autoridades”.
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Fue el miércoles 17 de mayo a las 08:26 horas que se registró el ataque en contra de uno de los escoltas de la alcaldesa de Tijuana mientras éste se encontraba sobre la calle Melchor Ocampo y calle 7 de la Zona Centro, para dirigirse a un salón de belleza en la zona norte de la ciudad, sitio que visita con frecuencia la edil.
Testigos refirieron que los presuntos responsables huyeron a bordo de una camioneta tipo Suburban, color guinda, que posteriormente fue abandonada en la avenida Unión en la colonia Marrón.
En la unidad fueron localizadas armas largas y chalecos antibalas. Hasta el momento no se reportan personas detenidas.
Tras los hechos, la mandataria municipal declaró “son las 11 de la mañana y hasta el momento no he recibido una sola llamada ni del fiscal, ni de la gobernadora, ni del secretario de gobierno, ni de ningún elemento del estado, y debo decir que esto habla de la falta de comunicación…….hago responsable de lo que me suceda a mí, a mi familia o a mis elementos al fiscal Iván Carpio; aquí o hay ineficiencia en el cargo o existe contubernio”.
