Otro gran ejemplo más de una actriz responsable de llevar una película a buen término. La protagonista es la espléndida veterana del cine Charlotte Rampling en el rol de Ruth, una mujer en sus años dorados que vive sola y bebe alcohol como si fuera agua.
En eso recibe la visita de su nieto Sam (George Ferrier), quien debe no sólo conocer a la abuela, sino convivir con ella tras un accidente que le causó fractura en una pierna.
Al principio el ambiente es incómodo, pero tolerable, gracias a Sarah (Edith Poor), la enfermera de la anciana. Pero cuando el padre de este joven deja la casa para atender los asuntos de su madre, empieza un encuentro forzado en esta familia de extraños.
Ruth no es, para nada, una típica abuela. No vacila en aventar los vasos de cristal cuando sospecha que su bebida ha sido rebajada con alcohol y pronto empieza a llamar la atención no sólo de Sam, sino de los amigos del chico.
El acercamiento entre estos dos personajes tiene lugares comunes y tal vez escenas donde no precisamente brilló la imaginación del guionista y director Matthew J. Saville, sin embargo, Rambling tiene tantísimas tablas que no permite que la atención se desvíe de un filme que termina girando en torno a Ruth, para fortuna de nosotros los espectadores.
La recomendación es más que obvia. Disponible en Prime Video y Apple TV. ***
Punto final. – “Smoking Causes Coughing”, la nueva película de Quentin Dupieux, es demasiado bizarra. Incluso para él mismo.