Andrés González Soriano, joven de 24 años de edad, originario de Tijuana, Baja California, compareció, la noche del 27 de febrero de 2023, ante la Oficina del Fiscal Federal, del Distrito Sur de California, con sede en San Diego, ya que supuestamente trató de ingresar a Estados Unidos -a través de la garita internacional de Otay Mesa-, con más de 998 kilogramos de metanfetamina y 24 kilogramos de fentanilo, por lo que se enfrenta a una posible pena máxima de veinte años de prisión, así como a una multa de 1 millón de dólares.
Los fiscales federales del Distrito Sur de California indicaron que a las 15:47 horas del 22 de febrero de 2023, González Soriano conducía una camioneta marca Chevrolet, modelo Chevy Van, por el puerto de entrada de Otay Mesa, cuando un agente de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés), lo remitió a un área de inspección secundaria, “en base a una referencia generada por computadora”.
Tras una búsqueda realizada por otros oficiales de la CBP en la camioneta, se encontraron 63 paquetes escondidos dentro de cajas de cartón, mismos que contenían sustancias que dieron positivo en pruebas de campo para metanfetamina y fentanilo, por lo que González Soriano fue arrestado, según dijo la Oficina del Fiscal Federal del Distrito Sur de California, que describió el hecho como “una de las mayores incautaciones de metanfetamina en el condado de San Diego”.
“Esta es una gran cantidad de drogas peligrosas que ya no están destinadas a las calles de San Diego y más allá […] Una incautación de esta magnitud salva vidas”, dijo el fiscal federal Randy Grossman, citado en un comunicado del Departamento de Justicia de EE.UU.
“Estas drogas son una plaga que destruye vidas y alimenta el crimen y la violencia en nuestras comunidades […] Esta incautación masiva probablemente salvó vidas y dio un golpe financiero significativo a los cárteles de la droga”, indicó, por su parte, Chad Plantz, agente especial a cargo de la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI, por sus siglas en inglés), en San Diego.
“Los oficiales de CBP son la primera línea para evitar que estas drogas peligrosas ingresen a los EE.UU. […] Mantener seguras a nuestras comunidades es una de nuestras principales prioridades, y esta importante interdicción evitará sus impactos negativos y las ganancias de la financiación de organizaciones criminales transnacionales”, señaló Sidney K. Aki, director de operaciones de campo de la CBP en San Diego.
El 14 de diciembre de 2022, elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), la Guardia Nacional (GN) y la Fiscalía General de la República (FGR), aseguraron en Tijuana, Baja California, más de una tonelada de una droga con las características de metanfetamina.
Mediante labores de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), de la FGR), se supo de la localización de un inmueble en la colonia Los Lobos de dicha ciudad fronteriza con EE.UU., por lo que se obtuvo de un juez una orden de cateo que permitió a las autoridades entrar en el lugar, donde encontraron la sustancia en costales, bolsas de plástico y otros recipientes.
“La probable metanfetamina arrojó un peso aproximado de mil 100 kilogramos y con ella, se aseguró el inmueble donde se ejecutó la diligencia, un arma de fuego, cartuchos útiles y un vehículo”, informaron las autoridades federales. La droga fue puesta a disposición del Ministerio Público Federal para continuar las investigaciones del caso, por la probable comisión de los delitos de contra la salud y violación a la Ley Federal de Armas de Fuego.
Antes, el 2 de octubre de 2022, agentes del Ejército y de la Fiscalía General de Baja California detuvieron a un sujeto que resguardaba más de 900 kilos de metanfetaminas, luego de que las autoridades acudieran al cateo de un domicilio ubicado la calle Colima, en la colonia Magisterial, en Tijuana, donde primero aseguraron tambos con la droga.