8.8 C
Tijuana
viernes, noviembre 22, 2024
Publicidad

Golpeador

El juez al acusado:

Se le acusa de entrar al Senado y golpear a 15 senadores. ¿Cómo se declara?
“¡Satisfecho!”.

Autor: Anónimo del Congreso.

A propósito de futbol

Publicidad

Anuncio

__

Al ver que un borracho viene en estado lamentable por la calle, un cura le dice en tono caritativo:

¡Hijo! ¿Por qué bebes tanto? ¿No te gustaría ser cristiano?

“No, padre, ¡me gustaría ser Messi!”.

Autor: Un fan.

Interesado

El suegro al posible yerno:

Usted quiere casarse con mi hija por mi dinero.

“No, señor, ¡claro que no!”.

¿Con cuál de mis hijas se quiere casar?
“¡Con la primera que se deje!”.

Autor: Hombre en busca de novia.

Simple sugerencia

La esposa al esposo:
Amor, ¿qué me pongo?

“¡Posiblemente a dieta, cariño!”.

Autor: Ex marido.

Alegato

El acusado al señor juez:

Si amar es un pecado, ¡entonces me declaro culpable!

“¡Cállese!, que usted está aquí por manejar borracho”.

Autor: Anónimo desde el alcoholímetro.

Buscando trabajo

Un hombre llega a una fábrica buscando empleo; el gerente le explica:

Aquí hay poco trabajo.

“¡Justo es eso lo que ando buscando!”.

Autor: Un desempleado.

Tacaño

¿Qué haces ahí pegado a la puerta de tu ex novia, si ya hace más de dos meses terminaron?

“¡Es que ella aún no ha cambiado la clave del WiFi!

Autor: Un regio.

Nuevo novio

Oye, ¿no es un poco joven tu novio?

“¡Nah! ¡Qué va!”.

Por cierto, ¿dónde está?
“Castigado. ¡No lo dejan salir!”.

Autor: Chamaco suertudo.

La verdadera historia de Adán y Eva

Eva pregunta a Adán:
“Adán, ¿esta hoja me hace ver gorda?”… Y de ahí empezaron todos los problemas de la humanidad.

Autor: Un historiador.

El verbo, según Pepito

En clase:

— Pepito, ¿puedes darme el pasado de ese verbo?
“Pues… Pienso que sería ese verbo antes de ser el verbo, profesor; si sus papás lo educaron bien para que fuera un buen verbo, donde nació, si tuvo algunos hermanos a los que también les pidieron ser verbo… ¡pero no puedo imaginarme más sobre su pasado!”.

Autor: Un profe de español.

Reprobado

En la época neandertal, el hijo indio muestra las calificaciones a su padre, quien molesto reclama:

“Te perdono que no sepas cazar mamuts, que no sepas construir hachas con una piedra y un palo, que no tengas ni idea de pintar en las paredes, pero ¿que repruebes Historia?”.

Autor: Un maestro.

El jefe

Un jefe sordo, al que siempre le tomaban del pelo por su condición, viene entrando a la empresa. Uno de sus empleados (el más confianzudo) dice con sorna y burla:

¿De dónde viene este viejo desgraciado y tacaño?

“De comprarme un aparato para la sordera. ¡Está despedido!”.

Autor: Un desempleado.

El sordo

Un jovenzuelo entra a la tienda de un hombre mayor, sabe que está algo sordo, así que gritándole pregunta:

¡ABUELO! ¿ME DA UN KILO DE AZÚCAR?
“¡No me grite, que no soy sordo! ¿Con filtro o sin filtro?

Autor: Abarrotero.

Un duro invierno

El jefe de la tribu mira con preocupación las nubes, parece que, como en años anteriores, este invierno será con frío intenso. Generalmente con sus prácticas indias, acierta la intensidad y el tiempo que durará, pero ha llegado la tecnología a su comunidad, tanto así que es el poseedor del primer celular en tierras indias. Entonces, decide hacer uso de un poco de tecnología y por primera vez apoyarse en ésta para predecir el tiempo.
Llama al servicio meteorológico y pregunta:

“¿Cómo va a estar el invierno que viene?”.

La señorita que lo atiende al otro lado de la línea responde: 

“Un poco intenso, según parece”.

Así que el jefe ordena a sus leñadores cortar más leña de la que generalmente se prepara para los inviernos, piensa para sí que los equipos modernos no se equivocan, mientras decide esperar unos días para hacer su segunda llamada al servicio meteorológico:

¿Cómo va a estar el invierno que se acerca, señorita?

“Bueno, los pronósticos han cambiado un poco. Parece que el invierno será un poco más duro de lo que se esperaba”.
Sin dudarlo, el gran jefe ordena recolectar más leña de lo común, así que todos los indios se ponen a trabajar arduamente cortándola para no pasar frío en el invierno.

Como todo buen líder de su comunidad, el gran jefe Pluma Blanca decide llamar de nuevo al servicio meteorológico para saber qué nueva sentencia tiene la infalible tecnología acerca del aparente crudo invierno que se avecina.
Las noticias no pueden ser peores… la chica que le atiende da un pronóstico nada alentador:
“Al parecer vamos a tener el peor invierno de todos los tiempos, señor, nosotros también estamos asustados”.

Antes de mandar erradicar toda la leña del bosque para prepararse, Pluma Blanca pregunta a la señorita:

¿Cómo pueden estar ustedes tan seguros de que el invierno será así de crudo?

“¡Porque hemos visto que los indios no paran de cortar leña!”.

Autor: Un meteorólogo.

- Publicidad -

Autor(a)

Gabriela Olivares
Gabriela Olivares
gabriela@zeta.com
- Publicidad -spot_img

Puede interesarte

-Publicidad -

Notas recientes

-Publicidad -

Destacadas

-Publicidad -