La Ruta Cueros de Venado, que abarca cuatro mil hectáreas en Tijuana, desde El Mictlán pasando por Rancho Casián hasta llegar al Viñedo Altos Baja, es una de las opciones ecoturísticas más visitadas en el estado, según el Comité de Turismo y Convenciones de Tijuana (Cotuco).
La antigüedad del lugar data de 150 años, en ella hay diferentes actividades para realizar, como ciclismo, senderismo, rappel, avistamiento de aves, así como visitar los sitios antes mencionados para disfrutar en familia de paisajes, flora, fauna e historia a 30 minutos de distancia de la Zona Río.
Ruta Cueros de Venado-primera parada
Ubicado en el Corredor Tijuana-Rosarito 2000, se encuentra el campo de flores de cempasúchil, mejor conocido como “El Mictlán”, que abre solo desde mediados de octubre y cierra sus puertas el 6 de noviembre. Ahí se puede disfrutar de representaciones artísticas de los Mexicas que creían en la existencia de la última morada para quienes fallecen, visitar su galería en honor al Día de Muertos, ir a su campo de calabazas, realizarse una limpia, probar diferentes platillos y comprar artesanías.
Ruta Cueros de Venado-segunda parada
A unos pasos del primer destino, está el “Rancho Casián” donde se puede encontrar el restaurante “La Huerta”, un sitio con una temática rústica, comida sencilla y un buen servicio, que se puede disfrutar todo el año; así como el “Country Pumpkin Fest” donde los visitantes se pueden tomar fotografías en escenarios con temática de Halloween, acompañados de artefactos utilizados en el campo en los años 30’s; visitar a los animales que tienen en los corrales: cabras, caballos, toros, cerdos, conejos, gallinas y burros-cebras o llevar a cabo actividades como montar a caballo, ver el rodeo, alimentar a los animales o comer distintos platillos en sus puestos de comida.
Ruta Cueros de Venado-tercera parada
En el kilómetro 9.5 del Ejido Mesa Redonda en el camino vecinal del Poblado Cueros de Venado, a 38 minutos del segundo destino, se encuentra el Viñedo “Altos Baja”. En él se pueden degustar diferentes vinos, desde el clásico tinto en tonos fuertes, pasando por el blanco con notas dulces y el rosado con frutos rojos, mientras se escucha la explicación del proceso de su creación y la historia del lugar.
