Uno de los grandes poetas no sólo de México, sino de la literatura hispanoamericana, falleció el lunes 3 de octubre, a la edad de 72 años.
Nacido en Ciudad de México el 8 de octubre de 1949, David Huerta recibió reconocimientos como el Premio Xavier Villaurrutia 2005; Premio Nacional de Ciencias y Artes 2015 en el área de Lingüística y Literatura; Premio Excelencia en las Letras “José Emilio Pacheco” 2018; y en 2019 le fue concedido el Premio FIL de Literatura en Lenguas Romances.
Sus poemarios, escritos entre 1972 y 2011, se encuentran reunidos en “La mancha en el espejo” (Fondo de Cultura Económica, 2013), incluida su obra maestra “Incurable” (Era, 1987).
David Huerta concedió generosamente diversas entrevistas a ZETA, ya sea en Guadalajara, Mérida o Tijuana. En algún diálogo con este Semanario se le cuestionó si, luego de una extensa y reconocida trayectoria, había llegado a alguna conclusión sobre poesía, a lo que elocuente, contestó:
“Para mí la poesía ha sido desde luego muchísimas cosas, no nada más un género literario, cosa que suele decirse ‘los géneros literarios: el cuento, la novela, el teatro, el ensayo, la poesía’. Yo digo: ‘la poesía no es un género, la poesía es la literatura’, es una de las conclusiones más saludables a las que he llegado. Todos los practicantes de los otros géneros tienen que dar cuentas a la poesía. Dicen: ‘es que es un género minoritario, no se venden los libros de poesía’”. Entonces lapidó: “La poesía es el género que incluye a todos los demás. La poesía es el gran género que es la literatura”.