Entre quienes integran la lista de más de 100 personas a la espera de ser jubiladas en Tecate, hay tres diagnosticadas con cáncer, trabajadores con más de 30 años de servicio y otros más que fallecieron esperando ver el fruto de su trabajo
Más de 100 miembros del Sindicato de Burócratas en Tecate, esperan ser jubilados; con más de 30 años de trabajo, algunos aún siguen laborando para su patrón, el Ayuntamiento, mientras que otros han fallecido esperando su pensión, misma que ni siquiera los deudos han podido recibir.
Hace unos meses el presidente municipal de Tecate, Edgar Darío Benítez Ruíz, informaba vistosamente una estrategia que permitiría avanzar con cinco jubilaciones cada dos meses, logrando que quienes se encuentran en la lista de espera avancen y reciban lo que por años pagaron mediante descuentos, catorcena tras catorcena; abriendo paso con ello también a que trabajadores que han sido catalogados por más de una década como de confianza, avancen en el tema de la obtención de las plazas sindicales, otorgando a su vez, dos por mes.
Hasta el momento, ninguna de éstas se han logrado; las autoridades siguen sin llegar a acuerdos que permitan resolver el destino de sus trabajadores, mostrando un patrón indiferente y falto a su palabra, que en el pasado mes de julio aseguraba: “Bueno, nosotros ya iniciamos la ruta de pagos extraordinarios al Issstecali, además de los pagos corrientes; hay que recordar que ya hemos pagado casi 40 millones de pesos al Issstecali, ya ahorita estamos por sacar a los primeros cinco jubilados en un convenio que se ha estado trabajando de manera tripartita con el Sindicato de Burócratas a nivel estatal, con el señor Manuel Guerrero y con el equipo financiero de Dagoberto Valdez con Issstecali. Van los primeros cinco; esperamos a partir de ahí, empezar una ruta para estar sacando de manera constante cinco cada bimestre”.
El pasado 19 de agosto, Darío Benítez recalcó que el Ayuntamiento se encuentra sano en el tema financiero, y que incluso se cuenta con una bolsa de millones para imprevistos que nada tiene que ver con el pago de los sueldos y aguinaldos que los trabajadores del Ayuntamiento van a recibir a finales de este 2022, pues este recurso ya está asegurado.
“Tenemos un excelente tesorero que siempre toma previsiones; tenemos apartado el gasto de fin de año para aguinaldos, ya lo que es el cierre del año ya está asegurado”, declaró en diversas ocasiones a medios de comunicación Benítez Ruíz.
A pesar de los logros pregonados y de las distantes mesas de trabajo que sostienen los representantes del Sindicato de Burócratas en el municipio de Tecate, encabezado por Rosa Isela Mercado, con los asesores técnico del Ayuntamiento, como Guillermo González Muñoz, el tesorero Antonio de Jesús Rosas Valenzuela y el propio Darío Benítez Ruíz, desde el mes de marzo -cuando declararon estos acuerdos- ningún jubilado ha logrado beneficiarse, manteniendo entre los afectados que se encuentran en lista de espera, a tres trabajadores del ayuntamiento que padecen cáncer, uno de ellos avanzado, y quienes solo han obtenido largas por parte de los representantes del XXIV Ayuntamiento respecto a su jubilación.
Una de las soluciones que ofrecen los asesores del presidente municipal para lograr que los trabajadores obtengan su jubilación, es que acepten renunciar a cerca del 25 por ciento de ésta, perdiendo así un importante porcentaje del recurso que por ley les corresponde.
El pasado 22 de agosto, durante la ceremonia realizada por la celebración del Día del Bombero, en la estación central de la corporación en Tecate, Doña Julia, familiar de un bombero fallecido, reclamó a la secretaria del Ayuntamiento, la licenciada Dora Nidia Ruíz Chávez, quien asistió en representación del alcalde, que pagara lo pendiente, refiriéndose a los gastos fúnebres que hasta este momento el Ayuntamiento no ha cubierto.
“Los busco y se me esconden, no me atienden a las oficinas. ¿Qué hago, ir a sus casas?” refirió entonces Doña Julia. En la misma situación se encuentran los deudos de policías caídos, quienes luego de las honras fúnebres de sus familiares no volvieron a saber de las autoridades municipales.