La Arquidiócesis Primada de México llamó, el 26 de junio al Gobierno Federal encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, a revisar su estrategia de seguridad, señalando que en el país “corre un río de sangre” por la creciente violencia e impunidad, ello tras los homicidios de los sacerdotes jesuitas, Javier Campos Morales y Joaquín César Mora Salazar -de 79 y 80 años de edad, respectivamente-, y del guía de turistas Pedro Palma Gutiérrez, asesinados al interior de una iglesia ubicada en la comunidad de Cerocahui, en el municipio de Urique, por José Noriel Portillo Gil, alias “El Chueco”.
“El asesinato de los sacerdotes jesuitas refuerza el llamado a examinar la estrategia de seguridad en México, pues vivimos una ola de violencia histórica: el número de asesinatos en lo que va del sexenio supera las 122 mil personas”, señaló el órgano de gobierno de la Iglesia Católica en México, través de una editorial publicada en el semanario ‘Desde la fe’.
El órgano católico dirigido por el cardenal Carlos Aguiar Retes, señaló que es grande el dolor que dejan los asesinatos de los sacerdotes jesuitas, “pero más grande es el dolor de saber que son miles de muertos en México”. Además, reprodujo las palabras del representante en México de la Compañía de Jesús, Luis Gerardo Moro Madrid, quien el 25 de junio del 2022 dijo que “la sangre de Pedro, Javier y Joaquín se une al río de sangre que corre por nuestro país”.
“Exigimos que las autoridades cumplan con su vocación y deberes. Queremos justicia y queremos paz. Queremos un México seguro y queremos ver el fin de esta vergonzosa impunidad. Si en 72 horas lograron recuperarse los cuerpos de dos sacerdotes y un laico, y avanzar en las averiguaciones, ¿por qué no hacer esto con tantos y tantos casos impunes?”, insistió Moro Madrid, Padre General de la Compañía de Jesús.
La Arquidiócesis Primada de México enfatizó que la promesa de las autoridades, de atrapar al asesino de los dos sacerdotes jesuitas ya “no es suficiente”, ya que atrapar a un líder del crimen organizado no resolverá la violencia en México. “Queremos una promesa de un mejor futuro, donde reine la paz y la justicia, donde la impunidad sea nula y donde las personas puedan caminar seguras por las calles”, apuntó.
El órgano eclesiástico católico recordó que en su más reciente mensaje, los obispos de México llamaron a un diálogo nacional con el propósito de emprender acciones concretas que construyan este camino a la paz. “Suscribimos este llamado: queremos trabajar en conjunto para construir puentes, dejar atrás la polarización y reconstruir el tejido social en beneficio de un México mejor”, finalizó.
El 25 de junio del 2022, en la misa de cuerpo presente celebrada por la muerte de los sacerdotes jesuitas, algunos religiosos de dicha congregación pidieron al presidente Andrés Manuel López Obrador, revisar la estrategia de seguridad seguida por su Gobierno y señalaron que el país está invadido por la violencia.
“Respetuosamente pido, pedimos, señor presidente de la República, revise su proyecto de seguridad pública, porque no vamos bien, y esto es clamor popular. Este evento lamentablemente no es aislado en nuestro país, un país invadido por la violencia y por la impunidad”, dijo el sacerdote jesuita Javier Ávila, líder de la comunidad de dicha congregación en Cerocahui, durante la misa de sus dos compañeros asesinados.
“Los abrazos ya no nos alcanzan para cubrir los balazos”, sostuvo Ávila, líder de la comunidad jesuita en la Diócesis de la Sierra Tarahumara, durante la homilía llevada a cabo en la iglesia del Sagrado Corazón de Jesús, en la capital homónima de Chihuahua.
“Los obispos han llamado a un diálogo nacional y queremos secundar esta iniciativa. Hacemos un llamado a la sociedad y autoridades a ya no agudizar la polarización del País, necesitamos construir puentes para encontrar caminos de paz. Queremos trabajar con todas y todas para crear esas condiciones de paz que tanto necesitamos”, añadió Moro Madrid.
“Ya no podemos olvidar que en México llegamos, entre 1964 y 2022, a 100 mil personas desaparecidas, que hasta ahora llevamos 122 mil asesinatos, que existe un mayor control territorial por parte del crimen organizado, y eso todos y todas lo sabemos, que crece el consumo y venta de droga en todos los lugares del país, y que la violencia se ha convertido en un modo de resolver los conflictos, una manifestación de poder y una práctica cotidiana”, abundó el representante en México de la Compañía de Jesús.
📍 No olvidaremos a Javier y a Joaquín, no olvidaremos su asesinato, así como tampoco olvidaremos su testimonio y ejemplo para servir en #Cristo.https://t.co/gp9QJMuZGa
— Desde la fe (@DesdeLaFeMx) June 26, 2022
‘MÉXICO SALPICA SANGRE’, AFIRMAN OBISPOS CATÓLICOS; URGEN A AMLO REVISAR ESTRATEGIA DE SEGURIDAD
“Ahora como nunca, el dolor de la cruz se vuelve más intenso por tanta sangre inocente derramada a lo largo y a lo ancho del país. Los índices de violencia y sus estructuras de muerte, se han desbordado e instalado en nuestras comunidades, desfigurando a la persona humana, y destruyendo la cultura de paz”, expuso Ramón Castro Castro, secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), en un video, publicado el 23 de junio del 2023.
“A lado de nuestro pueblo, esperamos una respuesta a la altura de las circunstancias por parte de las autoridades civiles en todos los niveles. Es responsabilidad de quienes gobiernan procurar la justicia y favorecer la paz y la concordia en la convivencia social”, agregó el jerarca católico, quien también recordó que el Sumo Pontífice ha expresado su consternación sobre la violencia en México.
“Esta realidad de violencia nos golpea, nuestro México está salpicando sangre de tantos muertos y desaparecidos, entre ellos 27 sacerdotes, incluidos los padres jesuitas que han sido asesinados por el crimen organizado, identificándose así con las miles de víctimas de nuestro pueblo que han tenido este fin, con las decenas de miles de desaparecidos a quienes sus familias siguen buscando”, agregó Castro Castro.
“‘¡Cuántos asesinatos en México!’, es la expresión de consternación que el papa Francisco nos dirige, desde lo más profundo de su corazón para consolarnos […] desde el dolor y sufrimiento que ha generado tanta violencia, sí ¡cuánta violencia! Los obispos, como pastores, queremos expresar de igual modo, toda nuestra cercanía y el profundo dolor que cargamos en nuestro corazón […] Esta situación es ya insoportable y nos reclama y exige a todos, dar frutos de paz”, externó el secretario general del CEM católico.
“La Conferencia del Episcopado Mexicano hace un llamamiento también a quienes son causantes de todos y cada uno de los episodios atroces de muerte y destrucción contra sus propios hermanos. Les recordamos que somos parte del mismo pueblo, les conminamos a que dejen de matar a sus propios hermanos y de violentar la paz social, recuperen el temor de Dios, y hagamos prevalecer su ley que nos dice: no matarás”, enfatízó el jeraca católico.
“En el nombre de Dios, sensibilícense, ante los lamentos de sus hermanos que son hijos de Dios, cuyas lágrimas de sufrimiento, impotencia y rabia contenida, claman hasta el cielo. Les suplicamos, les rogamos, les exigimos en nombre de Dios ¡basta de tanta maldad y odio!, todos queremos la paz”, añadió Castro Castro.
Por separado, en un posicionamiento, la CEM exigió acciones a autoridades de distintos niveles de Gobierno, un análisis de los planes de seguridad, así como un diálogo nacional para atender la problemática.
“Ante la gravedad de los hechos, hacemos un llamado al Gobierno Federal y a los distintos niveles de autoridades, en consonancia con el pronunciamiento que se ha realizado desde el Senado de la República: es tiempo de revisar las estrategias de seguridad que están fracasando”, indicó la CEM.
“Es tiempo de escuchar a la ciudadanía, a las voces de miles de familiares de las víctimas, de asesinados y desaparecidos, a los cuerpos policiacos maltratados por el crimen. Es tiempo de escuchar a los académicos e investigadores, a las denuncias de los medios de comunicación, a todas las fuerzas políticas, a la sociedad civil y a las asociaciones religiosas”, dijo.
“Creemos que no es útil negar la realidad y tampoco culpar a tiempos pasados de lo que nos toca resolver ahora. Escucharnos no hace débil a nadie, al contrario, nos fortalece como Nación. Todos somos mexicanos, todos necesitamos vivir en paz y concordia. Es responsabilidad de los gobernantes aplicar la ley con justicia para erradicar la impunidad, respetando los derechos humanos, pero procurando la seguridad de los ciudadanos y la paz social”, indicó la CEM.
¡CUÁNTOS ASESINATOS EN MÉXICO!, ESTADO FALLIDO Y “LEY DE LA SELVA”, CLAMAN EL PAPA Y RECTORES JESUITAS
El 22 de junio del 2022, durante el panel sobre “Justicia con Paz y Reconciliación”, llevado a cabo en el marco de la reunión anual del Sistema Universitario Jesuita, que se realizó en León, Guanajuato, los rectores de universidades jesuitas lamentaron que el Plan Nacional de Paz del presidente López Obrador se haya reducido a la creación de la Guardia Nacional, de corte militar, institución que, según dijeron, no ha servido para controlar la violencia.
“Cuando el Estado no tiene control territorial y permite que grupos armados lo controlen, a eso le llamamos Estado fallido, y tiene muchos años que desgraciadamente en México el territorio, las colonias, los barrios, los pueblos están siendo controlados por algún cártel y el Estado está ausente. La población en México estamos solos, abandonados a nuestra suerte, sometidos a la ley del más fuerte, sometidos a la ley de la selva. Estamos sometidos a la ley del secuestro, de la extorsión, del asesinato”, lamentó Juan Luis Hernández Avendaño, rector de la Universidad Iberoamericana Campus Torreón, Coahuila.
“Se diluyeron esas ocho medidas y sólo quedó la Guardia Nacional, un cuerpo policial militarizado, como la única medida para pacificar el país. Hoy tenemos que decir: esa estrategia fracasó”, acusó el rector de la Universidad Iberoamericana Campus Puebla, Mario Ernesto Patrón Sánchez, ex director del Centro de Derechos Humanos “Miguel Agustín Pro Juárez”.
Por su parte, el rector del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), Alexander Paul Zatyrka Pacheco, lamentó que la sociedad se esté acostumbrando a este nivel de violencia y que las autoridades se culpen unas a otras, sin resolver los casos. “Se tiran la pelota unos a otros. Es evidente que estos colectivos políticos no van a actuar si no hay presión de la sociedad civil”, indicó.
Mientras que al final de su audiencia general del 22 de junio del 2022, el papa Francisco condenó los asesinatos de los sacerdotes. Desde la Plaza de San Pedro, en el Vaticano, el también jesuita y jerarca de la Iglesia Católica manifestó su dolor y consternación por el ataque que además cobró al menos la vida de un tercer individuo, Pedro Palma Gutiérrez, un guía de turistas, y que por ahora mantiene en calidad de desaparecidas a por lo menos cuatro personas más.
“Expreso mi dolor y consternación por el asesinato en México, anteayer, de dos religiosos jesuitas, mis hermanos, y un laico. ¡Cuántos asesinatos en México! Soy cercano con el afecto y oración a la comunidad católica afectada por esta tragedia. Una vez más, repito que la violencia no resuelve los problemas, sino que aumenta los sufrimientos innecesarios”, dijo el religioso, cuyo nombre secular es Jorge Mario Bergoglio, cuyo mensaje replicó en su cuenta de la red social Twitter.