― ¡Mamá, mamá, en la escuela se burlan de mí porque soy ciego!
― Jajaja, ¡qué tonto! ¡Estoy atrás de ti!
Autor: Soltera y sin hijos.
En qué se parece…
¿En qué se parece el Vaticano y la Reforma Agraria en México?
― En que en 50 años sólo han producido cuatro papas.
Autor: Anónimo del PRI.
Aspirante
El entrevistador le pregunta al aspirante en el trabajo:
― Aquí necesitamos una persona seria. ¿Se considera Usted una persona seria y responsable?
― Chi.
Autor: Conocida residente de Tijuana que “pernocta” en Rosarito.
El asalto
Caminan por la calle y les sale un asaltante que le dice a la pareja:
― Quietos… La cartera o la vida.
El esposo le dice a su esposa, entonces:
― Mi vida, ¡vete con el señor!
Autor: Un regio.
La ensalada
― El secreto para que la ensalada quede bien rica es meterla dentro de una hamburguesa.
― Estoy a dos ensaladas de mugir.
― Uno está amolado cuando la ensalada pasa a ser el plato fuerte.
― Un amigo que diga: “tengo hambre” y se coma una ensalada… ¡es una amiga más!
Autor: Un carnívoro.
Inteligencia en el trabajo
― ¿Se considera Usted inteligente?
― A ver… si me analizo, no. Ahora, si me comparo…
Autor: Mejor así lo dejamos.
A propósito de Netflix
― Papi, ¿me lees un cuento?
― ¿Para qué?, siempre te duermes. ¡Como tu mamá con las series!
Autor: Adicto a series.
Malos tratos
El abogado le dice a la mujer:
― Señora, su esposo la demandó por malos tratos.
― ¡No puede ser! ¿Sobrevivió?
Autor: Intento de viuda.
Inventando palabras
― Mami, perdí el examen de español, según la profesora, porque invento palabras.
― Vaya, ¡de quién habrás aprendido esa estupidencia!
Autor: Un futuro orador.
Profesión
― ¿Profesión?
― ¡Ingeniero técnico superior en alisamiento vaporizado y pliegue uniforme de diferentes dimensiones de textiles!
― Plancha y dobla ropa en una lavandería, ¿no?
― ¡Sí!
Autor: Anónimo de una agencia de colocación.
Sirenas
El agente de tránsito detiene al hombre que viene zigzagueando por la vía.
― ¿Por qué no se detuvo al escuchar la sirena?
― ¡Porque son seres mitológicos!
― ¡Sople aquí!
Autor: Anónimo de un alcoholímetro.
La economía del país
― ¡La economía de mi país dice está empezando a mejorar sustancialmente!
― ¿Cómo lo sabes?
― ¡Lo leí en los periódicos con los que me tapé anoche!
Autor: Anónimo de Bienestar.
Chisme
Entra corriendo al gimnasio la mujer de más de 50 años y dice a sus amigas que están haciendo ejercicio en sus leggins, le ponen atención.
― Amigas, ¡les voy a contar un chisme que cuando lo oigan se les van a caer las lolas!
Mira a sus amigas nuevamente y al detallarlas vuelve a decir aterrada:
― ¡Ah no! ¡Ya se lo contaron!
Autor: La “amiga” que nadie quiere tener.
Acusado
El juez le pregunta al acusado:
― Se le acusa de entrar al Congreso y golpear a 15 legisladores. ¿Cómo se declara?
― ¡Satisfecho!
Autor: Un manifestante.
Diagnóstico
Una madre muy preocupada le pregunta al doctor:
― ¿Cuál es el estado de mi hija doctor?
― No sé. ¡No la tengo en Facebook!
Autor: Un residente de medicina.
Sueldo
― Sí, Martínez, yo sé que el sueldo no te alcanza para poder casarte, pero créeme, ¡algún día me lo agradecerás!
Autor: Anónimo de RRHH.
Gordas
― ¡Mamá en la escuela me dicen gorda!
― ¡Pobresilla!
― Gracias mami, ¿verdad que no estoy gorda?
― “¡Pobre-silla” en la que estás sentada la vas a romper!
* * *
― Mi amor ¿estoy gorda?
― Aléjate un poco para poder verte completa… ¡más!
Autor: Un flaco sangrón.
Junta de trabajo
En plena reunión de todos los empleados de la empresa el jefe dice:
― No me gusta señalar a nadie, pero el año pasado el rendimiento de uno de nosotros no fue bueno.
― Jefe, ¡me está señalando!
― Sí, ¡pero no me gusta!
Autor: Un jefazo.
Lección de geografía
La profesora le pregunta a Pepito:
― Pepito, ¿estudiaste el libro de geografía?
― ¡Sí profesora!
― Entonces, dime: ¿en dónde queda el Río Amazonas?
― ¡En la página 28, profesora!
Autor: Una profesora a distancia.
Mamá bromista
El niño grita desde el baño:
― Mamá, papeeel…
La bromista mamá responde desde la cocina:
― ¡Tijera!
Autor: Niño frustrado.
El mejor remedio
― Me sentía tan jorobado como un anciano de cien años, hasta que vi el doctor Domínguez. ¡Qué maravilla ese doctor!
― ¿Y qué te recomendó?
― ¡Que no me volviera a abotonar el pantalón con el ojal del cuello de la camisa!
Autor: Un quiropráctico.
