De diciembre a la fecha, en Mexicali se ha capturado a cuatro individuos considerados “generadores de violencia” u “objetivos prioritarios”, como oficialmente les dicen a los criminales y asesinos. Las aprehensiones han corrido por cuenta de autoridades de los tres órdenes de gobierno, todas operativas, ninguna especializada en investigación de delitos. Desde la captura de Felipe Eduardo Barajas Lozano “El Omega” por elementos de la Policía Municipal, en diciembre de 2021; la aprehensión de Luis Alfredo Garibay Félix “El Wicho”, hasta la caída de Diego Rentería Caro “La Wina” y Rubén Benítez Ponce “El 80”, todos capturados por manos de fuerzas preventivas. Sin embargo, de los cuatro sujetos, sólo uno contaba con orden de aprehensión emitida por la Fiscalía General del Estado: “El Wicho”, de “Los Chapitos”, era buscado por homicidio; mientras que “El Omega”, “La Wina” y “El 80”, todos integrantes de la agrupación delictiva de “Los Rusos”, no eran responsabilizados por hecho delictivo alguno. Pero, ¿a qué se debe la inoperancia de la FGE en torno a los delitos de alto impacto? El fiscal Ricardo Iván Carpio apenas asumió el cargo a finales del año pasado, y antes de este periodo mantuvo control sobre los casos de secuestro. Pero su Fiscal central, Rafael Orozco Vargas, estuvo al menos dos años al frente de la coordinación del grupo de Homicidios Dolosos en Mexicali, y por ende, la responsabilidad de solicitar mandamientos judiciales contra los objetivos prioritarios caía sobre sus hombros. Durante este periodo se recrudeció la violencia y la cifra de homicidios, en sólo un año, superó los 200; al año siguiente casi llega a los 300. Pese a que hubo más homicidios y que la mayoría se atribuyen a la delincuencia organizada, las órdenes de aprehensión no se focalizaron a los objetivos prioritarios, lo cual se traduce en impunidad. Al final, los criminales aprehendidos terminan bajo proceso judicial por la portación de armas de uso exclusivo del Ejército, por narcóticos o cualquier otro hecho delictivo flagrante, confirmando que no existe investigación en torno a los homicidios en Mexicali. Esperemos que esta constante no la arrastre hasta la Fiscalía Central, porque si no, ahora será toda la FGE la que tenga este problema.