Desde hace más de un año, el líder pescador Sunshine Antonio Rodríguez Peña, permanece preso en un penal de Hermosillo, Sonora, en espera de una audiencia para determinar su posible responsabilidad en el delito de delincuencia organizada, supuestamente, por pertenecer a una agrupación dedicada al tráfico de totoaba.
En noviembre del 2020, Rodríguez Peña fue capturado en un operativo realizado por autoridades federales en el puerto de San Felipe y Mexicali, donde detuvieron a varios presuntos operadores del conocido como “Cártel del Mar”.
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A más de un año de la aprehensión, dos de los detenidos en aquella ocasión fueron liberados, por no poder acreditar su participación en la agrupación delictiva, pero Sunshine Rodríguez Peña, permanece detenido desde ese momento.
En conferencia de prensa, el martes 8 de febrero, Sara Ahumada, esposa de Rodríguez Peña, reclamó al Gobierno de México y al Poder Judicial de la Federación, por dilatar la audiencia que estaba programada para el mes de noviembre del año pasado, pero que a lo largo de los meses anteriores ha sido postergada en varias ocasiones.
En el restaurante Sanborns y acompañado de varios de sus abogados, entre ellos Enrique Acosta Fregoso, aseveró que su única petición es que se le permita demostrar su inocencia, pues su proceso judicial se ha alargado injustificadamente, por lo que no se ha permitido que presente las pruebas ante el Juez.
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Agregó que dentro de la carpeta, de la cual ella posee una copia, no existe un sólo indicio de su involucramiento con la delincuencia organizada, y se limita a referir que sus actos de protesta “podrían” ser utilizados para apoyar a dicha agrupación delictiva de la cual -aseguró- duda de su existencia.
“Su protesta fue cuando cerraron el alto Golfo, nosotros tenemos permisos legales y nos dedicados a la producción de camarón. Entonces, no estamos en una delincuencia. Se le puso en prisión preventiva para acusarlo”, refirió la ofendida, quien se negó a hablar de los procesos judiciales de los otros individuos detenidos.
Entre ellos, Juan Luis García Ruiz, alias “La Yegua”, Segundo Valenzuela; Enrique “Kiki” García Sández, ex inspector de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA); y Gastón Eduardo Parra Aispuro, hermano de Óscar Parra, presunto líder de una de las más grandes estructuras criminales dedicadas a la pesca y tráfico de totoaba, el cual se encuentra detenido acusado de homicidio.
“Podría prestarse a eso, pero a estas alturas del partido pero a estas alturas no nos vamos a dar por vencidos, no vamos a mentir por salvarnos, no puedes inventar algo por salvarte. Su estado de salud no es bueno, pero aún así, rendido no lo van a ver, vamos a hacer hasta lo imposible ¿Qué quieren? ¿Qué se me muera en el penal?”, reclamó con la voz entrecortada mientras afirmó que ha solicitado audiencias con ministros y el propio Presidente para exponerle su caso, sin tener éxito.
