Una vez más, el llamado gobierno de la Cuarta Transformación hace de las suyas con la ciudadanía, al haber sido engañados por el señor Jaime Bonilla, con las supuestas licencias de conducir en cualquier modalidad, expedida por el gobierno, y que las expidió “permanentes”. Pero esa permanencia duró poco, pues la gobernadora Marina del Pilar obtuvo la gubernatura por mera inercia y eslogan del partido Morena, “La esperanza de México”; por eso ganó, no por inteligente, méritos, trabajo con el electorado, visión, experiencia… ganó por el arrastre amloísta, nada más.
Bueno, pues ya es poderosa. Y dijo: eliminen las licencias de manejo permanentes que dio mi antecesor Bonilla. Con este golpe al bolsillo de año nuevo 2022, Marina del Pilar, como dijo en ZETA, busca sanear finanzas del estado; y ya dio su primer paso inflacionario y traidor al electorado que la presentó en Mexicali.
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Siguen las mañas de los que fue el PRIAN, pero hoy con vestidura de otro color. Mismas ambiciones, misma antidemocracia, misma burocracia, mismo apantalle al estrenarse como gobernadora y quizá más de lo mismo. El único beneficio de AMLO es la ayuda a personas mayores de 65 años y las becas que otorgan a estudiantes (aunque no saquen dieces). Pero la antidemocracia permanece aún en el partido de Morena, así como la corrupción.
Allí está el funcionario de la oaxaqueña alcalde, detenido con dinero de extraña procedencia; allí está esto de no más licencias permanentes de la gobernadora… y lo que nos falta por vivir. Sabrá cuántas más calamidades gubernamentales. Ella nunca fue de mi agrado como candidata, menos como ejecutiva estatal. Antes dejó cargos incumplidos. Pero ya dio su primer revés al electorado al dañar el bolsillo de los habitantes de B.C. Ni hablar. Aún existen los cuentos de hadas y de Disneylandia.
Los impuestos subirán de acuerdo a la eterna inflación (toda la vida hay), así que nos apretamos el cinturón en el estado 29, con esta ley que nuestro “nuevo” gobierno trae, con sed de dinero y vaciar bolsillos. Es como la regularización de los autos chocolate: pura demagogia y sabor de engaño gubernamental de todos los colores que existen en tales partidos políticos.
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La politiquería la echamos a andar para sacar a Peña Nieto y a Kiko Vega, aunque parece que no dio resultados; el desencanto popular resurge como el ave fénix de las cenizas. En este gobierno morenista, dijo AMLO: no gasolinazos. ¿Cuánto cuesta el litro de gasolina? 21, 22 pesos, como las tortillas. Pronto se caerá la banda al electorado para desenmascarar a los morenistas y darles voto en contra, pues rápido los mareó el poder, el orgullo, el ego, y se siguen ensañando con el pueblo impuesto tras impuesto, de cualquier tipo.
Es lo que tenemos en 2022 con esta clase gubernamental burguesa que gobiernan en “Palacio” Municipal y “Palacio” de Gobierno, sintiéndose como reyes y reinas. Lucharon para más de lo mismo al pueblo.
Atentamente,
Leopoldo Durán Ramírez.
Tijuana, B.C.
