Los besos y los abrazos
ni con mi vieja funcionan,
y eso que le ocasionan
gemidos y arañazos.
Y después del holocausto
de pasión y de placer
vuelve el pleito a aparecer
y me saca del camastro;
la estrategia es un fracaso,
agredir es un placer.
Alberto Torres Barragán
Tijuana, B.C.