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lunes, septiembre 30, 2024
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Miguel Ángel Félix Gallardo, ‘El Jefe de Jefes’, ciego y sordo, da entrevista después de 32 años [VIDEO]

El capo sinaloense Miguel Ángel Félix Gallardo, alias “El Jefe de Jefes” o “El Padrino” -fundador del primer cártel que hubo en México, el de Guadalajara-, concedió una entrevista, por primera vez en los 32 años que lleva preso, y la exclusividad se la dio a la cadena estadounidense Noticias Telemundo.

Preso en la zona de máxima seguridad del Penal Estatal de Puente Grande, en Jalisco, el ex narcotraficante es un hombre anciano, de 75 años de edad, que está postrado en una silla de ruedas, sordo, ciego, afectado por una neumonía y con el brazo roto. “Mi salud es pésima, mi familia está haciendo un hoyo para yo ser enterrado en un árbol”, señaló Félix Gallardo.

“No tengo pronóstico de vida ninguno, puesto que perdí todo. Perdí la sensibilidad, los oídos, los ojos […] Me quitaron ocho hernias, me privaron de la vista, me privaron de los oídos y como ve, no puedo caminar […] Yo soy un cadáver el cual no espera más que ser enterrado en la raíz de un árbol”, dijo el capo sinaloense a Issa Osorio, corresponsal del medio estadounidense.

“El Jefe de Jefes” tiene que usar una silla de ruedas, debido a que cada vez que intenta caminar se resbala. Aunado a lo anterior, el capo sinaloense no ve nada en el ojo izquierdo y debe ayudarse de un aparato auditivo color rosa para entender lo que otros dicen.

“Tengo días enfermo. Quiero que él [el camarógrafo de Telemundo] vea mi ojo”, señaló Félix Gallardo. “¿Está ciego?, le preguntó la reportera. “Completamente ciego. Completamente. Sordo”, respondió el ex capo sinaloense. “¿Qué le pasó en su brazo?”, lo cuestionó la corresponsal de Noticias Telemundo.

“Me lo quebré, porque no puedo caminar. Camino y me resbalo”, dijo el ex líder del Cártel de Guadalajara. “¿Por qué necesita el oxígeno, está enfermo?”, insistió Osorio. “Traigo una neumonía grave, muy grave”, aseveró “El Jefe de Jefes” en la entrevista.

El 20 de febrero del 2019, el Segundo Tribunal Colegiado Penal de la Ciudad de México negó a Félix Gallardo el beneficio de cumplir en confinamiento domiciliario, en una residencia de Zapopan, Jalisco, una de las dos condenas que le fueron impuestas, en dicho caso, a 40 años de prisión, por delitos contra la salud, acopio de armas y cohecho, homicidio, tráfico de drogas y lavado de dinero.

Los magistrados del órgano jurisdiccional confirmaron que el capo sinaloense no probó que los males de salud que padece fueran tan graves o pongan en riesgo su vida, como para no compurgar en prisión los 10 años que le restaban de condena en dicho expediente.

El capo sinaloense expuso que, además de tener más de los 70 años de edad que la ley marca como requisito para acceder al beneficio, padece de pérdida de visión en un ojo y cataratas en otro; mal funcionamiento de un oído; problemas de reflujo y antecedentes de micro infartos cerebrales y hernias.

Ante ello, “El Jefe de Jefes” manifestó la necesidad de cuidados médicos especiales que no podían facilitarle en el Penal Estatal de Puente Grande, en Jalisco, y pidió su confinamiento en una casa del Fraccionamiento Ciudad del Sol, en Zapopan.

El 31 de julio del 2018, el magistrado Miguel Ángel Aguilar López resolvió que el capo sinaloense no había acreditado que su estado de salud impidiera que compurgara la pena en la cárcel, ya que, conforme a los dictámenes, sus padecimientos estaban dentro del rango de normalidad para sus entonces 73 años de edad.

“Los padecimientos que presenta no evidencian una notoriedad innecesaria para que cumpla con la pena impuesta”, señaló. Sin embargo, Félix Gallardo presentó el amparo en revisión 288/2018 contra esta última resolución, pero los magistrados del colegiado confirmaron la sentencia de Aguilar López.

Además de este caso, el capo también solicitó a un juez de Jalisco el confinamiento domiciliario en el otro juicio por el que fue condenado el pasado 27 de agosto del 2017, a 37 años de prisión. Ello por el asesinato del agente de la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA por sus siglas en inglés), Enrique “Kiki” Camarena Salazar, y del piloto aviador de la extinta Secretaría de Agricultura y Recursos Hidráulicos, Alfredo Zavala Avelar, ocurridos en 1985.

Luego de 28 años, el Juez Cuarto de Distrito de Procesos Penales Federales en Jalisco, sentenció al ex líder del Cártel de Guadalajara, por el delito de homicidio calificado con premeditación y ventaja, en agravio del agente estadounidense adscrito al Consulado de EE.UU. en México, y, del piloto aviador. En ese mismo juicio también fue condenado al pago de 20 millones 810 mil pesos como reparación del daño a las víctimas indirectas de los secuestros y homicidios de esas mismas dos personas.

Asimismo, en forma solidaria y mancomunada por los anteriores sentenciados: los sinaloenses Rafael Caro Quintero y Ernesto Fonseca Carrillo, alias “Don Neto” -los otros dos fundadores del Cártel de Guadalajara- se fijó como reparación integral del daño más de 20 millones de pesos, los cuales deberán ser asignados a las familias de las víctimas.

Además, el juez dictó sentencia absolutoria a Félix Gallardo, por los delitos que se le formularon contra la salud, en su modalidad de posesión con fines de comercio, indicó el diario Milenio, que dio a conocer en su momento el hecho. Esta fue la última resolución judicial que faltaba dictarle a “El Padrino”.

Félix Gallardo estuvo internado en el penal de máxima seguridad Centro Federal de Readaptación Social (CEFERESO) No. 2 de Occidente -mejor conocido como “Puente Grande”-, a pesar de que en mayo del 2016 se había informado que sería traslado a la Comisaría de Sentenciados del Estado de Jalisco, de mediana seguridad, “por su senilidad y precario estado de salud”, además de que ya no es considerado una persona con perfil de alta peligrosidad.

La resolución del incidente -no especificado- de traslado dictada por el Juez Cuarto de Distrito de Procesos Penales Federales en Puente Grande, dentro de la causa penal 82/85, fue notificada tanto a las autoridades penitenciarias estatales como al comisionado del Órgano Administrativo Desconcentrado Prevención y Readaptación Social (OADPRS).

Según lo indicaron sus abogados defensores, el ex jefe del Cártel de Guadalajara tiene graves problemas de la vista y pérdida parcial de la capacidad auditiva. A Félix Gallardo también le diagnosticaron faringitis aguda, hernia hiatal, gastritis crónica, dolor y ardor durante la micción, así como estreñimiento crónico y trastorno ansioso depresivo.

El capo estuvo preso, desde abril de 1989, en el Reclusorio Sur de la Ciudad de México, así como el CEFERESO No. 1 “El Altiplano” en Almoloya de Juárez, Estado de México, y de forma más reciente en el Centro Federal de Rehabilitación Psicosocial (CEFEREPSI), en Morelos, por algunos padecimientos psiquiático-psicológicos.

¿QUIÉN ES MIGUEL ÁNGEL FÉLIX GALLARDO?

Félix Gallardo -quien fue detenido el sábado 8 de abril de 1989, cuando sólo tenía 43 años de edad- fue el narcotraficante más poderoso en su momento, dueño de las principales rutas de comercio de droga en la mitad del país y Centroamérica en la década de los 70 y 80 del Siglo pasado. Los cálculos de su fortuna se estimaron en 500 millones de dólares, así como un patrimonio de 50 casas y 200 ranchos.

Tras su arresto -que dirigió el director de inteligencia de la desaparecida Policía Judicial, Guillermo González Calderoni-, a “El Jefe de Jefes” le fueron incautadas diversas propiedades, incluidos un hotel, una farmacia, una empresa de bienes raíces, así como numerosas cuentas bancarias.

Félix Gallardo nació el 8 de enero de 1946, en Culiacán, Sinaloa. Fue desde inicios de la década de 1960, integrante de la Policía Judicial de Sinaloa, llegando a tener entre sus labores ser escolta del entonces gobernador, Leopoldo Sánchez Celis (1963-1968). Según sus datos generales, es viudo, tiene 15 dependientes económicos y no consume ninguna droga.

En la década de los 70’s del Siglo pasado, Félix Gallardo quitó el liderazgo del narcotráfico a Pedro Avilés Pérez También, conocido como “El León de la Sierra”, y se asoció con algunos de los principales capos de esa época, como Manuel Salcido Uzeta conocido, alias “El Cochiloco”, además de “Don Neto” y Caro Quintero.

“El Jefe de Jefes” creó una poderosa organización que controlaba el tráfico de amapola y marihuana en Sinaloa, Durango, Jalisco, Guerrero, Chihuahua, Baja California y Nayarit, por ejemplo. A principios de los años 80 del Siglo pasado, estableció contacto con el Cártel de Medellín -que dirigió Pablo Escobar Gaviria-, a quienes empezó a comprar cocaína para enviarla a Estados Unidos.

Félix Gallardo tuvo bajo su mando Juan José Quintero Payán, “Don Juanjo”; Pablo Acosta Villarreal, “El Zorro de Ojinaga”; a Juan José Esparragoza Moreno, “El Azul”; a Héctor Luis ‘El Güero’ Palma Salazar; a Amado Carrillo Fuentes, “El Señor de los Cielos”; y, a Joaquín Archivaldo Guzmán Loera, “El Chapo”, entre muchos otros.

Además, se le vincula como tío de Sandra Ávila Beltrán, la llamada “Reina del Pacífico”, y también como tío de los hermanos Arellano Félix, fundadores del Cártel de Tijuana, ya que es primo de Alicia Félix Zazueta, madre de los narcotraficantes asentados en Baja California.

Autor(a)

Carlos Álvarez Acevedo
Carlos Álvarez Acevedohttps://www.carlosalvarezacevedo.com
Corresponsal del semanario ZETA de Tijuana y del periódico Noroeste de Sinaloa, desde febrero de 2016. Durante varios años fungí como editor de opinión y jefe de redacción del diario digital SinEmbargo.
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