Estados Unidos envió a Canadá y México millones de dosis de vacunas contra el coronavirus SARS-CoV-2 (que causa la enfermedad COVID-19), desarrollada por la farmacéutica británica AstraZeneca, en conjunto con la Universidad de Oxford, sin que que las autoridades de salud de los tres países inspeccionasen apropiadamente las operaciones del fabricante.
Ello según una revisión de registros y de la intervención de reguladores, citada, este jueves 29 de mayo, por la agencia británica Reuters, misma que detalló, que la planta en Baltimore perteneciente a Emergent BioSolutions Inc estaba produciendo vacunas contra la COVID-19, tanto de AstraZeneca Plc, como de Johnson & Johnson, según los términos de un contrato con el Gobierno estadounidense por 628 millones de dólares.
“A fines de marzo, bajo presión para ayudar a otras naciones a acceder a las vacunas, el Gobierno del presidente Joe Biden liberó 1.5 millones de dosis de la fórmula de AstraZeneca para Canadá y 2.5 millones de dosis para México”, indicó Reuters.
Según le dijeron a la misma agencia autoridades de ambos países, reguladores europeos habían certificado que la fábrica de Emergent cumplía con “buenas prácticas de manufacturas” y, sobre esa base, tanto Canadá como México comenzaron a usar la vacuna contra la COVID-19.
Pero la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) dijo a Reuters que la certificación se basó en una inspección remota que se centró en una parte de la instalación, que en realidad no producía las inyecciones de AstraZeneca, un hecho que no se había informado con anterioridad.
Siempre según Reuters, la Administración de Alimentos y Fármacos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) detuvo la producción en la fábrica tres semanas después, luego de que se descubriera que la vacuna de J&J estaba contaminada con el material utilizado para las inyecciones de AstraZeneca.
Después, los inspectores de la FDA documentaron las condiciones insalubres y el personal mal capacitado en la planta, que se había revisado rápidamente para fabricar vacunas durante la pandemia, por lo que la producción sigue detenida, con decenas de millones de dosis de ambas vacunas en el limbo regulatorio.
“No se han relacionado informes de enfermedades con las vacunas fabricadas por Emergent, y los reguladores no han alegado que se hayan administrado vacunas contaminadas a nadie. Emergent dijo que no ha habido evidencia de contaminación en las dosis de AstraZeneca producidas en su sitio”, agregó Reuters.
“Pero los detalles del proceso de aprobación defectuoso muestran puntos ciegos que pueden desarrollarse cuando los reguladores nacionales comparten la responsabilidad de supervisar una industria farmacéutica global compleja. Estos solo se agravaron dada la urgencia de la pandemia”, insistió la agencia.
Emergent dijo en un comunicado, citado por Reuters, que “ha trabajado con funcionarios de salud de todo el mundo para garantizar que cualquier sustancia de fármaco de vacuna que fabriquemos cumpla con los estrictos requisitos de seguridad y calidad antes de su distribución”.
Por su parte, AstraZeneca dijo que las vacunas fabricadas por Emergent fueron sometidas a más de 40 pruebas para cumplir con sus requisitos de seguridad, pureza y calidad, y que sus estándares de fabricación “son evaluados rigurosamente y verificados de forma independiente por los reguladores”.
Mientras que la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS), regulador sanitario mexicano, dijo que sigue “confiado en que el proceso de autorización se llevó a cabo con todo el rigor necesario”.
EBRARD CONFIRMA: EU ENTREGARÁ 2.5 MILLONES DE DOSIS DE VACUNA ASTRAZENECA A MÉXICO
El pasado 18 de marzo, Marcelo Ebrard Casaubón, titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) confirmó que eran ciertas las versiones periodísticas de que el Gobierno de Estados Unidos cedería a México, al menos 2.5 millones de dosis de vacunas contra la COVID-19, desarrollada por la farmacéutica británica AstraZeneca, en conjunto con la Universidad de Oxford.
“Me consultan si es veraz que hay un acuerdo de vacunas con EU en seguimiento a la conversación entre los presidentes López Obrador y Biden. Sí, es correcta la información. Mañana a las 9 am les doy los detalles porque todavía estamos trabajando en ello. Buenas noticias!”, señaló el canciller mexicano, en su cuenta de la red social Twitter.
Me consultan si es veraz que hay un acuerdo de vacunas con EU en seguimiento a la conversación entre los Presidentes López Obrador y Biden. Sí, es correcta la información. Mañana a las 9 am les doy los detalles porque todavía estamos trabajando en ello. Buenas noticias!
— Marcelo Ebrard C. (@m_ebrard) March 18, 2021
Ese mismo día, tanto el diario estadounidense The Washington Post, como la agencia británica Reuters afirmaron que el Gobierno encabezado por Joe Biden enviará a territorio mexicano 2.5 millones de dosis excedentes de vacunas contra SARS-CoV-2, desarrolladas por AstraZeneca-Oxford.
Según ambos medios, basados en dichos de funcionarios estadounidenses de alto nivel -que declararon en anonimato-, el acuerdo estaría basado en la cooperación de México para contener un aumento de la migración en la frontera, y que este no se trata de un intercambio de vacunas a cambio de reprimir migrantes, sino de encontrar una manera de atender la afluencia récord de adolescentes y niños centroamericanos que intentan cruzar a EE.UU.
“El virus no tiene fronteras […] Sólo podemos superar el virus si ayudamos a nuestros socios globales”, indicó uno de los funcionarios estadounidenses de alto nivel, quien agregó que el plan de compartir las vacunas, que aún no está concluido, no afectaría las metas del presidente Biden de tener suficientes dosis para todos los adultos de EE.UU. al final de mayo.
Hasta ese momento, al menos 17 países habían suspendido la aplicación de de la vacuna contra el coronavirus SARS-CoV-2 (que causa la enfermedad COVID-19), desarrollada por la farmacéutica británica AstraZeneca, en conjunto con la Universidad de Oxford, y ya autorizada para su uso de emergencia en más de 70 naciones.
Ello ante el temor de que tras dicha inoculación se formen coágulos en la sangre, luego de que se presentaran casos de trombo embolias en personas inmunizadas. Sin embargo, tanto el Gobierno de Reino Unido, como la Agencia Europea del Medicamento (EMA), la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la empresa británica, han defendido la seguridad de la vacuna anti COVID-19.
El pasado 4 de enero, la COFEPRIS autorizó el uso de emergencia en México de la vacuna contra el coronavirus SARS-CoV-2 (que causa la enfermedad COVID-19), desarrollada por el grupo británico AstraZeneca en conjunto con la Universidad de Oxford.