Sergio Guevara Escamilla es el nuevo presidente de la Cámara Nacional de la Industria Pesquera y Acuícola (CANAINPESCA), Delegación Baja California, en sustitución de Alfonso Rosiñol de Vecchi.
Durante tres décadas se ha dedicado al cultivo de moluscos bivalvos, ha recibido el segundo lugar nacional en Acuacultura Rural en 2018, y el Premio Nacional de Acuacultura Sustentable en 2019, además de que es Consejero Nacional de la Canainpesca, y del Consejo Coordinador Empresarial de Ensenada.
En su plan de trabajo propone fortalecer la representación del sector ante las autoridades de los tres niveles de gobierno, lo mismo en materia de sanidad e inocuidad que en la mediación de conflictos en materia de uso de suelo.
“Nuestra actividad se realiza -principalmente- en aguas de jurisdicción federal, lo que motiva una representación fuerte para agilizar y destrabar permisos y concesiones, y también resulta fundamental la regulación productiva, en lo que a certificación se refiere”, comentó.
Propone además fortalecer la cadena de valor del sector pesquero y acuícola, con un análisis más fiel del impacto económico y social, incluyendo su fusión con la gastronomía, la viticultura y la industria cervecera, por citar algunos ejemplos.
También habrá de alentar mejores prácticas en la pesca, acuacultura y plantas de proceso, donde la certificación de pesquerías como la de sardina, resultaría un avance significativo, lo que no solo mejora la imagen del sector, sino que protege un valioso recurso regional.
“En el caso del atún aleta azul -expresó-, resulta necesario actualizar las fichas técnicas pesqueras y acuícolas, de acuerdo con la realidad actual de los ranchos atuneros, además de dar seguimiento al plan de manejo pesquero publicado en abril 2021”.
Por último, manifestó el interés de impulsar la reactivación y fortalecimiento de la Secretaria de Pesca y Acuacultura de Baja California (SEPESCABC).
Lo anterior, precisó, se basa en las acciones que la dependencia puede encauzar en materia de ordenamiento de la actividad, combate a la pesca furtiva, descentralización de la administración de los recursos bentónicos, y la inspección y vigilancia.
Sobre el reciente embargo impuesto por Estados Unidos al camarón mexicano, dijo que debe ser atacado con un esfuerzo conjunto de gobierno y productores, mediante la vía diplomática y la aplicación justa y rigurosa de la ley.
Expresó que la decisión de Estados Unidos de retirar la certificación al camarón mexicano, es lamentable, pero no imposible de corregir en el corto plazo.
Los recortes presupuestales en el Gobierno Federal, afirmó, han traído como consecuencia que en el ámbito pesquero se haya creado un vacío en la inspección y vigilancia.
“Esto último es esencial en el caso no solo de la pesca furtiva, sino también, para cumplir con los programas internacionales como los Dispositivos Excluidores de Tortugas (DET) en las redes camaroneras”, añadió.
Abundó que dichos programas implican no sólo que los barcos camaroneros tengan y usen los DET, sino que también exista evidencia documental de la inspección y vigilancia del uso de los mismos.
Se dijo también que por todos los beneficios que ofrece, el mercado estadounidense no debe perderse, y se recordó que la industria pesquera mexicana, en coordinación con el Gobierno de México ha trabajado en el uso de Dispositivos Excluidores de Tortugas Marinas (DET), desde la década de los 90.
Incluso, “fue nuestro país el que propuso a la región la negociación y suscripción de la Convención Interamericana para la Protección y Conservación de las Tortugas Marinas (CIT)”, indicó el presidente nacional de Canainpesca.
“El resultado del esfuerzo de la industria camaronera y el Gobierno de México es que por 10 años ininterrumpidos obtuvimos la certificación anualmente, y con ese precedente es posible tomar medidas para reactivar la certificación del camarón”.
