Con un rezago de más de mil 500 pagos de finiquitos pendientes y otros dos mil 500 maestros en espera de jubilación, el gobierno de Jaime Bonilla Valdez ha agravado la crisis relacionada con los maestros que cumplieron más de 30 años de servicio activo en Baja California.
En entrevista con ZETA, la profesora Guadalupe Sánchez, representante de los profesores jubilados de la Sección 37, recordó que el problema se generó desde la administración del panista Francisco Vega de Lamadrid, en el año 2018.
Con la promesa de un cambio en el año 2019, los maestros otorgaron un voto de confianza a la administración morenista, pero a casi dos años de gestión, la maestra considera que el resultado ha sido de indolencia.
Expuso que el gobernador Jaime Bonilla Valdez prometió terminar con el rezago de pagos de finiquitos para el 31 de octubre del 2021, además de incrementar a 100 los paquetes de jubilaciones mensuales; sin embargo, dado el rezago actual, eso está lejos de cumplirse.
Desde el 2020, profesores y funcionarios estatales sostuvieron reuniones para definir estrategias que permitieran acabar con los pendientes de pago a más de mil 500 jubilados que no han recibido su finiquito.
Acordaron que se otorgaría un promedio de 20 millones de pesos para pago de finiquitos, lo que representaría una cobertura de 35 docentes.
Sánchez asegura que Bonilla Valdez les pidió paciencia y prometió que a partir de enero del 2021 se erogaría la cantidad suficiente para cubrir el adeudo con 100 profesores de manera mensual, pero en los primeros cuatro meses de este año apenas se cubrió ese total de 35; y lo anterior solo fue durante el mes de marzo, cuando decenas de profesores jubilados se manifestaron a las afueras del edificio del Poder Ejecutivo y realizaron durante cinco días una huelga de hambre.
Profesores jubilados hicieron múltiples manifestaciones en Mexicali y Tijuana, en busca de una respuesta del gobernador, pero el secretario de Hacienda, Adalberto González Higuera, se limitó a responder que se había generado un rezago con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público para la liberación de dichos pagos; ha pasado más de un mes y nada se ha solucionado.
La docente Guadalupe Sánchez aseveró que en medio de estos reclamos, varios profesores han fallecido sin recibir su finiquito, mientras que otros llevan ya tres años esperando recibir su dinero de parte del Poder Ejecutivo.
El último pago fue el que se realizó en marzo pasado, y correspondió a 35 maestros que se habían jubilado desde agosto del 2018.
Actualmente existe un rezago de dos mil 500 maestros que ya cumplen con la edad de jubilación, pero que el Poder Ejecutivo no ha autorizado, los cuales se han visto obligados a interponer recursos ante las autoridades laborales e incluso por medio de amparos, para exigir que sean reconocidos sus derechos al cumplir 30 años de servicio.
“Esta situación es sumamente grave”, concluyó la maestra.