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miércoles, octubre 2, 2024
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La Iglesia y la comunidad política

(Desde 1965, los Episcopados Católicos de todo el mundo)

 

“No son las ambiciones de unos cuantos ni tampoco las muy buenas intenciones de unos pocos las únicas fuerzas que deben participar para decidir el derrotero de una nación”.

-El compromiso cristiano ante las Oposiciones Sociales y la Política, Conferencia Episcopal Mexicana (18 octubre 1973).

 

El 21 de mayo de 1965, los obispos de Yugoslavia publicaron uno de los primeros mensajes sobre el tema Iglesia y Política; La formación religiosa de la juventud, la defensa de la familia y la libertad del cristiano. No se apantalle, pues, si escucha usted en 2021 mencionar ególatramente o manosear el tema de la familia y la vida. Ya en la tierra de la Madre Teresa de Calcuta (Albania-Yugoslavia) se menciona el tema.

Entre 1965 y 1975, los obispos de todo el mundo elaboraron documentos relativos a la participación de los cristianos-católicos en el campo de la política. Como dijera el historiador Manuel Olimón Nolasco (sacerdote), no se puede separar a la Iglesia del Estado, considerando que los católicos conforman tanto la Iglesia como el mismo Estado. Una cosa es el Gobierno y otra la gran comunidad de personas que hacen la Iglesia y a la vez la Polis o Estado. Citemos algunos de los documentos elaborados por los obispos en torno a la política:

*España: “Es necesario potenciar la participación de los ciudadanos en la vida pública” (1974).

*Alemania: “La evolución socio-política del país” (1972).

*Bélgica: “El desarrollo de los pueblos” (1970).

*Portugal: “Para una práctica cristiana de la política. Política, Iglesia y Fe” (1972). “Derechos humanos y participación político-social” (1973).

*Argentina: “La situación dramática que vive el país lleva a decir una palabra con cristiano espíritu de servicio” (1971).

*Brasil: “Juzgar lo que está de acuerdo con el Evangelio y sobre su aplicación corresponde a los obispos” (1970).

*Colombia: “El compromiso político de los cristianos” (1974). “Misión de la Iglesia en el orden temporal” (1965).

*Chile: “El desenlace violento de nuestra crisis institucional” (1973). “Parecer sobre el momento del país ante el resultado de las elecciones presidenciales” (1970).

*Guatemala: “Al acercarse la campaña electoral previa a las elecciones generales” (1969), Conferencia Episcopal Guatemalteca.

*México: “El compromiso cristiano ante las opciones sociales y la política” (1973).

*Nicaragua: “El deber de participación en el quehacer político” (1974).

*Paraguay: “Nuestro país en pleno proceso de transformación y acelerado cambio social” (1966).

*Perú: “La Iglesia en un país con voluntad de forjar una sociedad más justa” (1971).

*Santo Domingo: “Ante las elecciones generales” (1966).

*Uruguay: “Misión de la Iglesia en esta hora difícil que nos toca vivir” (1970).

*Venezuela: Algunas consideraciones de interés general sobre la intervención de la Iglesia en lo político” (1973).

*África Oriental (Kenia, Malawi, Tanzania y Zambia): “Ante la negación de los derechos humanos y de la justicia social” (1970).

*Vietnam: “Ante los acontecimientos que tendrán influencia decisiva en el destino de nuestro pueblo y de la Iglesia católica en el mismo” (1973).

“El desconocimiento de la verdad es culpa tanto del que la oculta como del que no la busca. La búsqueda esforzada de la verdad es parte importante del bienestar personal y de la auténtica vida social, y se manifiesta en la exigencia del derecho de informar y de ser informados”.  Así se expresan en el punto 111 del alabado documento que durante dos años prepararon todos los obispos de México y que dieron a conocer en octubre de 1973.

Obispos como don Manuel Pérez Gil (Mexicali), Juan Jesús Posadas Ocampo (Tijuana), Carlos Quintero Arce (Hermosillo), Sergio Méndez Arceo (Cuernavaca), Samuel Ruíz (Chiapas), Bartolomé Carrasco (Oaxaca), Manuel Talamas (Cd. Juárez), Adalberto Almeida (Chihuahua), José Salazar López (Guadalajara), y tantos otros insignes obispos, en Compromiso cristiano en las opciones sociales y la política lo expresaban como “nuestra respuesta a Cristo en el campo político”. Y continúan: “El cambio de estructuras que no signifique renovación de personas y de grupos se convierte en una nueva forma de opresión y lesiona la dignidad de las personas”.

Hay vicios de nuestra vida social que están muy arraigados porque encuentran apoyo en nuestra mentalidad, porque cuentan con cierta base legal, real o ficticia, y porque la oración social facilita su permanencia. Esto reclama la acción política (votar) en sentido estricto; esto es, aquélla que lucha por la adquisición y el ejercicio del poder para lograr estructuras más justas y conformes al plan de Dios. (La Iglesia y la Comunidad Política, Isidoro Martin, BAC, no.377)

 

Germán Orozco Mora reside en Mexicali.

Correo: saeta87@gmail.com

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