Aunque no reveló los avances de la investigación sobre los asesinatos de los hermanos González Moreno de Guadalajara, el fiscal de Jalisco, Gerardo Octavio Solís Gómez, anunció este jueves 13 de mayo que la causa de la muerte de los jóvenes privados de la libertad y de la vida fue asfixia mecánica.
Durante la rueda de prensa virtual que acostumbra rendir los días jueves, el encargado de la procuración de justicia en la entidad del Occidente del país aseguró que las pesquisas ya van avanzadas, aunque se negó a compartir los datos con los que se cuenta porque se entorpecería el éxito de la investigación.
Sin embargo, durante la sesión de preguntas y respuestas respondió sobre el resultado de las necropsias que arrojó como causa de muerte la asfixia mecánica. Al cuestionamiento sobre si prevalece la hipótesis de la confusión, Solís Gómez dijo que se mantiene como línea de investigación, al igual que persisten otros posibles móviles.
Acerca de si un hombre custodiado por agentes de la Fiscalía General de la República (FGR), que vive en la misma calle de las víctimas, y quien fue atacado a balazos en Tlaquepaque la misma noche del plagio, es un funcionario federal, estatal o un particular, el fiscal se negó a proporcionar el dato porque “pues es parte de lo que no se puede decir”.
El asunto es relevante, pues dentro de la línea de la confusión, el pasado 10 de mayo, Gerardo Octavio Solís expresó que tanto la privación de la libertad de los hermanos Juan Alberto, Ana Karen y Luis Ángel González Moreno, en su casa de la colonia San Andrés, como la balacera de Tlaquepaque estarían relacionada, dada la vecindad de la persona escoltada y los jóvenes, igual que el poco margen de tiempo entre uno y otro evento criminal.
Sin embargo, este jueves, al ser cuestionado si había alguna relación particular entre los muchachos asesinados y ese misterioso personaje, del que se reserva los datos la autoridad, el funcionario aseguró que no, que no existe ningún vínculo.
Como se informó en su oportunidad, los hermanos González fueron sustraídos de su domicilio después de las 22:40 horas del viernes 7 de mayo por sujetos encapuchados y armados, uno de los cuales portaba un chaleco táctico con las iniciales “CJNG”. Se llevaron a sus presas a bordo de una camioneta y no se volvió a saber de ellos. A los minutos en Tlaquepaque se dio la agresión a los agentes federales que fungían como escolta del vecino de las víctimas.