El deporte de los puños ha sido parte de su vida prácticamente desde su nacimiento, ya que su padre y abuelo fueron boxeadores. Ahora, con 18 años de edad, Emmanuel Cota es uno de los prospectos que va abriéndose paso en esta frontera, como muchos otros a lo largo de la historia.
En su última pelea en Tijuana, dentro de la función “Noches de Boxeo XLVI”, organizada por Promociones González en Arena Big Punch, “El Canario”, sumó su cuarta victoria por nocaut, al vencer en el tercer asalto a José Pech.
“Me sentí muy bien, aunque esperaba un rival más fuerte, quería cerrar más activo. Me sentí muy paciente en esta pelea, mi esquina me decía que tirara la derecha y cuando lo hice pude tumbarlo. Vamos a seguir peleando en Tijuana y poco a poco avanzando para ser campeón mundial. Esperamos regresar para junio”, confió el oriundo de Northridge, California, pero hijo de tijuanenses.
La historia de Cota en el deporte de los puños comenzó desde los 8 años, ya que es algo que trae en la sangre, por lo que ha sabido sobrellevar su carrera gracias a los conocimientos que le han transmitido su padre y su abuelo, luego de que estos debutaran como profesionales en sus respectivas épocas, “para mí significa mucho tenerlos en la esquina porque me crie con ellos y me enseñaron todo lo que sé, ellos me guían por buen camino, me pueden decir qué es lo bueno y lo malo”.
Para su padre, Manny Cota, el hecho de que su hijo pueda seguir sus pasos es motivo de orgullo, ya que tanto él como su padre, tuvieron que colgar los guantes al sufrir un accidente.
“Lamentablemente el destino nos dio otras avenidas, pero gracias a Dios aquí estamos con mi hijo y vamos a quebrar esa cadena. Tuve un accidente en motocicleta y fractura en pómulo con trasplante de córnea, y ya no pude seguir. Mientras que mi papá tuvo un accidente de carro con fractura de columna. Para nosotros es una motivación estar ahora con mi hijo, porque es algo que quise hacer yo y ahora lo veo en él”, reconoció el progenitor de “El Canario” Cota, quien espera seguir los pasos de su ídolo, Julio César Chávez.