Un total de 13 personas muertas, de las cuales 10 fueron identificados como migrantes mexicanos, perdieron la vida tras un brutal choque protagonizado por una camioneta Ford Expedition y un tractocamión de doble remolque, sobre la carretera estatal 115, en Holtville, California.
Inicialmente se informó que se trataba de 15 personas fallecidas, pero tras la definición de las autoridades del vecino país del Norte, se ajustó a 13 personas sin vida.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) confirmó que 10 de los individuos eran de nacionalidad mexicana y el resto eran centroamericanos. Se sabe que presuntamente entraron a Estados Unidos de manera ilegal, por medio de un boquete localizado en el muro fronterizo en Mexicali, por el cual cruzaron dos camionetas con un total de 40 migrantes.
Una fue la protagonista del accidente con resultados fatales, mientras que la otra se incendió (sin que hasta el momento se conozca el origen del siniestro) minutos más tarde, tras la detección del cruce ilegal; de la camioneta incendiada se detuvo a los tripulantes por parte de la Patrulla Fronteriza.
El segundo accidente, en el cual fallecieron los trece migrantes, se registró aproximadamente a las 6:30 de la mañana del 2 de marzo, al norte de Calexico. La camioneta Expedition -conducida por un hombre de 28 años residente de Mexicali- fue impactada por un tractocamión conducido por un residente norteamericano, cuando el primero intentó ingresar a la vialidad principal.
La movilización de autoridades del vecino país del Norte fue inmediata y en poco tiempo se logró trasladar a tres personas vía aérea por medio de helicóptero a un hospital, y el resto a través de vehículos de emergencia; los pronósticos de salud eran reservados y las víctimas permanecían bajo cuidados especiales en los centros médicos Hospital Pioneers Memorial en Brawley, y el Desert Regional de Palm Spring.
El mismo día del accidente, el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de EE.UU. (ICE, por sus siglas en inglés) dijo que sus agentes “han iniciado una investigación de contrabando humano” tras el accidente automovilístico.
Las autoridades estadounidenses también informaron que estaban trabajando con el Consulado mexicano para identificar a las víctimas, que tienen entre 20 y 55 años de edad. Entre los heridos, el más joven tiene 16 años. Muchos de ellos no hablaban inglés, por lo que suponen podrían haber sido trabajadores agrícolas.
