Martínez o Hernández

En la repartición de la alianza “Va por Baja California”, que integran PAN, PRI y PRD, a este último partido le correspondió designar al candidato a la alcaldía de Tijuana. El PRI nominará para la misma posición en Rosarito y Tecate, mientras el PAN tendrá candidatos en Mexicali y Ensenada. A pesar que la grilla política de los Jorges, Ramos y Hank, es que ya de acuerdo entre ambos y en sintonía, cualquiera de ellos sea “adoptado” por el Partido de la Revolución Democrática para ser, de nueva cuenta, candidatos a la presidencia municipal de Tijuana. Pero no. Dicen los perredistas que ni con uno ni con otro. De hecho, que su gallo es el saltillense Jaime Martínez Veloz, quien llegó a Baja California al inicio delos noventa durante el Gobierno Federal de Carlos Salinas de Gortari, y fue candidato del PRI a la alcaldía de Tijuana en 1998, pero lo derrotó el panista Jesús González Reyes. Después se cambió de un partido a otro hasta llegar a Morena, de donde salió después de un enfrentamiento político electoral con Jaime Bonilla Valdez. Pero, así como están decididos los perredistas, Martínez Veloz también: no quiere ser candidato a alcalde, lo que desea es ser, de nueva cuenta, diputado federal. En tales condiciones, en el PRD han estado hurgando entre los perfiles locales y les ha llegado el nombre del todavía titular del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública en el Estado: Juan Manuel Hernández Niebla, empresario a quien se le ha movido la patita hacia la política. Dicen que el ex presidente de la Coparmex no vio con tan malos ojos la propuesta y está considerando seriamente vestirse de amarillo para entrar a la llamada Alianza Opositora. Ahí está. O es Martínez, o es Hernández.